A estas alturas de la película es incuestionable la figura de Nacho Vegas como uno de los grandes cantautores de la música española de todos los tiempos. Un autor prolífico y polifacético que hemos podido ver inmerso en multitud de proyectos, Eliminator Jr., Manta Ray o Migala, sus brillantes discos en solitario o sus discos compartidos con Bunbury–«El Tiempo de las Cerezas»(EMI, 2006)– y Christina Rosenvinge –«Verano Fatal»(Limbo Starr, 2007)-. Con un estilo muy personal que bebe de muy diversas fuentes, literarias -es frecuente oirlo mencionar a Carson McCullers, Faulkner, Melville o Bret Easton Ellis-, musicales -Townes Van Zandt, Nick Cave, Dylan, Leonard Cohen o Smog- y de una vida muy intensa en todos los aspectos.
Su relación con la música folk asturiana se remonta al año 1997 y el proyecto Diariu, junto al escritor, periodista y realizador Ramón Lluis Bande. Canciones intensas y emotivas que aúnan modernidad y tradición con el asturiano como vehículo de vivos sentimientos. Y en cierto modo esa tradición asturiana ha estado siempre presente en su música, de forma directa –«Añada de Ana la friolera» o “La canción de la duermevela” – o indirecta.
Un papel fundamental para que Lucas 15 sea una hoy una realidad lo juega Xel Pereda (miembro de Llan de Cubel y guitarrista de Las Esferas Invisibles, el grupo de acompañamiento de Vegas), quién conoce a Nacho cuando este lo llama como técnico de sonido para la gira del disco «Cajas de Música Difíciles de Parar» (Limbo Starr, 2003). Ahí comienza una amistad que los lleva a hablar de la música tradicional y de sus posibilidades de llevarla al terreno del rock. Tres años después de este primer encuentro, comienzan a darle forma al proyecto, hay que buscar repertorio, formar la banda y compatibilizarlo todo con los discos de Nacho en solitario. Poco a poco, lo que no era más que una idea comienza a hacerse realidad.
Xel Pereda hace una selección de más de sesenta temas del cancionero tradicional asturiano de los que eligieron once para llevarlos a su terreno, con el «Murder Ballads» (Mute, 1996) de Nick Cave & The Bad Seeds en mente y la tradición en las manos. Una vez seleccionado el repertorio el siguiente paso era formar una banda, para ello recurren a músicos asturianos de primera fila que enseguida se involucran con ilusión en el proyecto, el teclista Chus Naves (Koniec), el bajista Luis Rodríguez (Alto Volto) y Manu Molina -acompañante de Nacho Vegas desde su debut “Actos Inexplicables” (Limbo Starr, 2001)– a la batería. El nombre lo toman de la Biblia, Xel Pereda en una entrevista en Indyrock comenta que “el evangelio según San Lucas en su capítulo 15, 11-32 cuenta la parábola del retorno del hijo pródigo. Trata la historia de un muchacho que vuelve a casa arrepentido después de una vida de excesos a buscar el cariño y la compresión del padre. Nos parecía un buen símil ya que volvíamos a nuestra música después de años de excesos de rock”.
Tienen las ideas muy claras, no hay prisa, cuando las canciones estén listas se editan. Quieren trabajar con tranquilidad y en un ambiente propicio, para ello deciden reunirse en el estudio que Xel tiene en Gijón y encargarse ellos mismos de la edición del disco. Las canciones comienzan a tomar forma y tras dos años de trabajo la edición del disco cada vez está más cerca. La presentación en sociedad de la banda se produce el 15 de diciembre de 2007, en la Universidad Laboral de Gijón con motivo de su 400 aniversario.
El lanzamiento del disco, “Lucas 15” (Lloria / PIAS, 2008),se produce en enero de 2008 por Lloria, sello discográfico nacido de la mano de Montse Álvarez (Nosoträsh) y el propio Xel Pereda, con el principal objetivo de la grabación y difusión de grupos asturianos. De la distribución a nivel nacional se encarga PIAS Spain. El disco sale a la venta en dos ediciones, una sencilla en digipak y otra limitada, un disco-libro forrado con tela roja y logo en tinta dorada con un precioso libreto con las letras de las canciones e ilustraciones de Isidro Suárez. Tiene una buena acogida entre el público y la prensa especializada. Tras su lanzamiento inician una mini-gira de presentación que los lleva, entre otras, a la sala Joy Eslava de Madrid, a la sala Bikini de Barcelona y al Teatro Cervantes de Valladolid. Gira que retomarían en verano con su participación en el Sonorama, en la Semana Grande de Gijón y en Pola de Siero.
En los escasos conciertos que han ido realizando hasta la fecha han ido presentando temas nuevos, lo que es un augurio de que posiblemente el proyecto vaya a continuar. Lo que está claro es que, teniendo en cuenta la prolífica trayectoria de Nacho, se quedará en un proyecto en un segundo plano con lanzamientos esporádicos. El tiempo dirá, aún es pronto para adelantar acontecimientos.
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