Los Mismos

El sello Columbia mantuvo entre 1965 y 1967 entre sus filas a un trío vallisoletano llamado Los Jolly´s. No pasaron de hacer versiones que los convirtieron en un grupo de segunda fila. A principios de 1967 sus componentes masculinos: Antonio Pérez Gutiérrez –Toby- y Benjamín Santos Calonge son requeridos por la corneta militar lo que les obliga a posponer sus planes musicales. Por su parte, la  cantante Elena Vázquez Minguela realiza su Servicio Social, que era lo que la patria obligaba a sus jóvenes féminas y sufre una mutación, pasando de ser una chica de provincias graciosa y llenita a una atractiva mujer delgada y cosmopolita vestida siempre a la última.

Entre tanto el sello Belter se interesa por ellos. Columbia no acepta que pasen a otra marca con el mismo nombre y, en un evidente guiño de complicidad, se rebautizan como Los Mismos; es decir los mismos que antes eran Los Jolly´s.

La discográfica catalana apuesta fuerte y pocos días después de acabar la mili, ya están cantando en el III Festival del Atlántico de Puerto de la Cruz. Ganan de calle con “El Hombre del Tiempo” (Belter, 1968). Apenas tres semanas más tardes concurren al Festival de Mallorca con “El Puente” (Belter, 1968). No ganan, pero se convierte en la canción emblemática de aquel verano…y de alguno de los siguientes. Supone el primer número 1 de ventas para el trío y el espaldarazo definitivo a su incipiente carrera. Las cosas iban tan rápido que Toby y Benjamín aún lucen en las portadas de estos primeros sencillos su corte de pelo de inspiración militar en sus nucas. Ambas canciones festivaleras vienen firmadas por J.Morell y Ricardo Ceratto.

Belter ve un filón en estos muchachos y despliega toda una campaña de imagen, que los convierte en referentes de una determinada forma de vestir. En esos primeros tiempos, ellos lucen casacas de estilo clásico abotonadas hasta el cuello, mientras ella aparece siempre con flores en el pelo y vestidos cortos de inspiración más o menos campestre.

1969 va a ser un año decisivo en su carrera. Acuden de nuevo al Festival de Mallorca, esta vez para ganar con “Catalina” (Belter, 1969). Ganan también en Orense el Festival del Miño con “Una Vez” (Belter, 1969) y rematan el trío de ases festivaleros con “El Panadero” (Belter, 1969), un villancico moderno y rabiosamente comercial que merecería ser más conocido y que también se alza con un premio en el Festival de Villancicos de aquel año. Pero su disco más vendido no va a ser ninguno de estos, sino el single: “Voy a Pintar las Paredes con tu Nombre / Sugar, Sugar” (Belter, 1969), dos canciones anteriormente grabados por otros artistas, pero a las que ellos sacan un muy buen partido y unos buenos réditos económicos. También es el año de la edición de su primer LP: “Los Mismos” (Belter, 1969), aunque se trata de un disco que simplemente aglutina canciones ya editadas antes en formato pequeño. El Instituto Español de Emigración les encarga el disco “Operación España” (Belter, 1969), que se distribuye gratuitamente entre emigrantes extranjeros.

Los Mismos son en ese momento un seguro de ventas y casi todos sus discos entran en el top 10. Es cierto que se les acusa de banales y horteras, pero ellos tienen muy claro cuál es su terreno y lo que su público demanda de ellos, canciones alegres, rítmicas, pegadizas y con letras sin problemas.

A partir de 1970 cesa su omnipresencia en festivales de la canción y se centran en una carrera discográfica en la que cada vez abundan más los covers en español de temas ingleses y norteamericanos. Sus discos más recordados de aquel año son: “Don Juan / El Camino de Papá” (Belter, 1970) y la versión del trío inglés Christie, “San Bernardino” (Belter, 1970), que vende más que el original con quien compite por los primeros lugares del hit parade. Aquel mismo año editan otros dos long plays, que aportan escasas novedades. También este año se convierten en el único grupo en competir en el programa “Pasaporte a Dublín” con el que TVE buscaba su representante en Eurovisión. No son los elegidos –fue Karina- pero las apariciones cada sábado por la noche durante un par de meses en la pequeña pantalla aumentan no poco su fama y su caché

La imagen del grupo ha ido evolucionando y madurando, pero sigue siendo muy cuidada. Podemos ver a los chicos con las vestimentas retro que tanto les gustan, como sombreros canotier, chalecos, bastones, trajes antiguos y a Elena con una imagen de mujer fuerte sin renunciar a las minifaldas que la habían hecho famosa. Sus apariciones en televisión son innumerables y ellos no defraudan nunca en su puesta en escena ante las cámaras.

Tras un 1972 que no pasa de discreto, explota el mayor éxito de su carrera. “Pon una Cinta en el Viejo Roble” (Belter, 1973), que llegará al número 1 en listas de ventas y popularidad. Se trata de un tema del grupo Dawn, que aquí no había tenido gran relevancia hasta que Los Mismos lo hicieron suyo. Este mismo título encabezará el LP “Los Mismos” (Belter, 1974).

A partir de ese momento, la carrera de Los Mismos inicia un lento declive, aunque aún venderán un buen montón de ejemplares de sencillos como “Mrs. Vanderbilt” (Belter, 1974) y sobre todo del eurovisivo inglés: “Guarda tus Besos para Mí” (Belter, 1976).

Sus últimos trabajos serán el LP “Nosotros” (Belter, 1977) del que se extrae el sencillo: “Ámame, Tómame” (Belter, 1978). Poco después el trío pondrá punto final a su carrera, un punto final relativo pues reaparecerán años después.

Hacia 1996, Los Mismos vuelven a la carga con Benjamín, Elena y su marido Guillermo Antón. Es evidente que su mejor tiempo ha pasado, pero en muy poco tiempo se convierten en imprescindibles dentro del circuito de oldies con discos recopilatorios como el doble CD “35 Años con la Música” (Divucsa, 2000), entre otros trabajos basados fundamentalmente en su amplia discografía de los 60 y 70.

Elena Vázquez bajo el nombre de Helena Bianco, por el que se la conoce desde hace muchísimos años, ha simultaneado y sigue desarrollando su carrera solista con apariciones junto a sus compañeros de Los Mismos, siendo actualmente sus apariciones como cantante solista o junto a otros cantantes y grupos de su época su principal actividad artística.

Los Mismos representan la cara más amable y comercial del pop español con canciones de fácil consumo y una amplia discografía pródiga en éxitos, que va desde sus inicios en lo que se llamó canción turística hasta su madurez con temas cargados de romanticismo, pasando por sus buenas versiones en nuestro idioma de un determinado pop comercial anglosajón. Un trío alabado por sus seguidores, denostado por sus detractores, pero siempre imprescindible para entender el devenir de la música española más popular.