Grabado y editado en varios países americanos en los años 78-79, aquí no saldría al mercado hasta principios de 1981 y lo hizo de rebote, tras la popularidad a toro pasado que había alcanzado merced a Julio Iglesias. Y es que la gran figura latina había hecho suyo el tema principal de este LP, retitulándolo «O me quieres, o me dejas». Luego, ya por encargo, Luis escribió alguna otra canción para Julio, aunque realmente para entonces el asturiano ya estaba retirado de la música y dedicado a sus negocios de hostelería en España y Centroamerica.
El LP es una colección de canciones otoñales, una suerte de quiero y no puedo para una excelente voz a la que sus mejores años ya le habían pasado.
Luis sigue teniendo una voz perfectamente afinada y un timbre agaradable y demuestra un cierto arte para la composición en temas bien trabajados, como «Una cinta en el pelo». Pero la mayoría son canciones que discurren lentas y pesadas como un mercancías a punto de entrar definitivamente en vía muerta. Destellos de una calidad y un oficio como pocos cantantes masculinos han tenido en la hostoria de nuestra música moderna.