Canta les Seves Cançons

«La actitud de Delfí Abella de adherirse a este tarea, a pesar de sus ocupaciones personales, toma un valor de ejemplo porque nos da a entender que el juego de hacer canciones no es incompatible con los trabajos más serios. Bien al contrario, nunca ha sorprendido que un hombre de la calle publique un libro de poemas y con el cambio de tiempos deviene igualmente normal que grabe un disco de canciones» Lluís Serrahima en la contraportada de este microsurco.

Para su primera grabación, Delfí se presenta sólo con su guitarra, sin artificios ni arreglos de ningún tipo. Sus conocimientos del instrumento y, sobre todo, de su afilado lápiz que convirtió a este psiquiatra en la ironía de la nova cançó. Este microsurco está compuesto por cuatro composiciones propias, ya que, aunque Delfí adaptara varios temas para, entre otros, Guillermina Motta, Maria del Mar Bonet o Maria Amèlia Pedrerol, este cantautor sólo registrará canciones compuestas por él mismo.

Abre el EP el tema más conocido del barcelonés, «Cap al futbol«, donde hace una crítica a todo lo que rodea a este deporte, desde el excesivo fanatismo de los aficionados, a los periodistas deportivos, al no saber perder… vamos que más cincuenta años después y no es que haya cambiado mucho la cosa. El otro tema satírico es «L’home al volant» donde el objeto de burla son los conductores y, en especial, aquellos que cambian su carácter cuando tienen el volante en sus manos y se creen los reyes de la carretera.

Completan este artefacto «Quan érem infants«, con aire solemne, pero que habla de la de infancia y los buenos recuerdos que nos suele traer esos tiempos; y «Oh, meravella!» donde Delfí nos aconseja que aunque haya días mejores y otros peores siempre «una cançó podrem cantar«.