En efecto, un disco de remixes, por lo que stricto sensu no es un álbum de Manta Ray, pero aquí está. Con la misma secuencia que la reproducida en “Pequeñas Puertas que Se Abren y Pequeñas Puertas que Se Cierran” (Astro, 1998), las canciones de Manta Ray van siendo reelaboradas por diversos artistas del desaparecido sello Cosmos, uno de los puntales de la electrónica en la España de los 90.
Algunas, como “Suspicion” mantienen, a pesar del filtrado, toda o mucha similitud, pero otras, como “O.F. king”, se transforman en algo casi nuevo pero reconocible a la vez, que es lo que uno espera de este tipo de álbumes.
En su momento resultó muy interesante e incluso más que otros tantos del estilo que pulularon por el mercado de entonces, pero hoy día la mayor parte de sus propuestas electrónicas han quedado totalmente desfasadas y han envejecido fatal; parecen básicas e ingenuas. De verdad, una pena.