Passion

Mucho es el tiempo que pasó desde la última vez que se había tenido noticias en disco de Qloaqa Letal. La vuelta a la actividad de la banda vallisoletana se concreta, además de alguna actuación en directo (hay fotos de la que dieron en la sala Wurlitzer Ballroom de Madrid en este trabajo precisamente), con la entrada en estudio en enero de 2012. Lo hicieron, con una «formación casual» en Geek Records de Madrid donde dejaron registrados media decena de temas. El reparto de funciones fue la siguiente: Chema Zurita diseña «la parte musical», encargándose además de bajos y guitarra; Txutxo Krueger la batería y Sergio Morris los solos de guitarra.

Roucky adapta un par de temas que trae ya del «Black Album», para construir, por ejemplo, toda una leyenda sobre un indomable en la piel de Nick Detroit: «Hombres que no mueren jamás / en la letra de una canción«. Sin embargo, es quizá en «Passion» donde se masca más atmósfera de épica o epopeya rockera. Probablemente sea el punto en el que mayor cambio se pueda apreciar de la estela sonora que arrastra el grupo.

El sonido se ha endurecido en general, se ha hecho más rock potente, pero en el esqueleto y maneras de «Pesadillas» o «Nunca esclavo» se aprecia la raíz original, la que conformaba los temas de aquel CD grabado en los 80.

Atrapa la tensión irritante de las guitarras de «Dios te salve«, que raspan en lo que Roucky mantiene su tono de voz de siempre.

Para alargar la sombra de banda maldita, el resultado final de las grabaciones no vería la luz hasta 3 años más tarde después de su grabación. Plazos incumplidos y problemas varios hicieron que no fuera hasta 2015 que por fin saliese a la calle de mano de Rumble. Una pena, al igual que lo breve del disco, porque se trata en general de un retorno más que digno de una banda que imprimió su nombre en el panorama del punk peninsular de hace muchas décadas.