Párate y Te Contaré

Este disco completa el cuarteto de obras grandes de NMJ. No es casualidad que de los discos publicados entre 1974 y 1977 salgan los temas más conocidos del Mester y que buena parte de su repertorio de directo a lo largo de casi medio siglo se nutra de las canciones de estos años.

Con este LP se recupera el estilo que el grupo había ido desarrollando desde sus principios, si bien con una realización mejor y unos arreglos mucho más pulidos que en sus primeros álbumes. La mayor parte del material contenido aquí fue recogido personalmente por los miembros del grupo en diferentes localidades castellanas.

También guarda un carácter monográfico, aun incompleto, que en próximas ediciones discográficas se irán acentuando. Incluyen temas burlescos en la que la Iglesia es puesta en solfa. La “Epístola de Cabrín Cabrete” con chanzas en supuesto canto gregoriano y latín macarrónico. Las cuitas amorosas y la curiosa forma de curar las enfermedades de “Estaba el curita”. En el mismo sentido transita “LA canción del entremés” con letra basada en el romancero tradicional de Menéndez Pidal.

El disco se inicia y termina con una jota instrumental cuya melodía s encomienda a la bandurria de Luis. Sigue el triste “Romance de la viuda”, el triste final de un torero muerto en la plaza y el traslado del cadáver a su casa, todo envuelto en oníricos toques de oboe y flauta de pico.

“Las Jotas de Vegas” era un tema que habían interpretado en directo en numerosas ocasiones, pero no es hasta 1977 en que fue grabado. Es NMJ en estado puro con letras mordaces a ritmo de jota vivaz.

El almirez y la bandurria introducen “25 pueblecillos”, en el que repasan algunos aspectos relevantes de la vida, fiestas y gastronomía de una serie de aldeas de Valladolid y Segovia.

 “Ronda de casamiento” es un sencillo tema de ronda, dividida en dos partes: la despedida de la novia por parte de los mozos de la puebla y la segunda con una melodía y ritmo distintos que describen la ceremonia de la boda.

Por distintas razones personales de los miembros del grupo no volverán por el estudio de grabación hasta tres años más tarde, a pesar de estar en su mejor momento creativo.