Delirio Específico

Casi cuatro años hemos tenido que esperar para poder escuchar la continuación de «Desayuno Continental» (Mushroom Pillow, 2009), el notable debut del cuarteto barcelonés Extraperlo. Durante todos estos años los miembros de esta formación han estado experimentando con otro tipo de sonidos desde los diversos proyectos paralelos que tenían, como Granit o Capitán. Pero, a pesar de esto, el sonido de Extraperlo no se ha resentido lo más mínimo; es más, suena más compacto y contundente que su predecesor. Y ese es uno de los puntos fuertes de este LP.

Este segundo trabajo es el de su confirmación. En él dan un golpe sobre la mesa para demostrar que no eran el producto de temporada que muchos quisieron ver por el sonido cercano al tropicalismo de su debut. «Delirio Específico» (Canadá, 2012) es un trabajo más meditado y trabajado donde se mantienen las bases del sonido por el que fueron conocidos, aunándolos con interesantes toques nuevaoleros que recuerdan a grupos como Claustrofobia («Las corrientes del golfo«), y el pop elegante y sofisticado de Roxy Music.

El culpable de aunar todos estos conceptos para darle al álbum un sonido homogéneo no es otro que Pablo Díaz-Reixa (El Guincho); Borja y Aleix son los acompañantes habituales en sus directos. Su producción está a la altura de las composiciones y las consigue dar un aura luminosa («Resplandor» o «Saxo Azul«) y una sensación de unidad que demuestra lo acertado de su elección.

También destacar, aparte del empaque del sonido y su gran producción, el mayor protagonismo de Alba a las voces («Modelos blandos» o «Ardiente figura«); estos juegos vocales hacen que los temas crezcan exponencialmente. Por achacar algo, podríamos decir que no hay un hit instantáneo en todo en álbum, un single que consiga vender mejor el producto pero me parece un detalle nimio. Particularmente doy más valor a la capacidad de hacer un gran disco por encima de hacer algunas buenas canciones. «Delirio Específico» es un disco lleno de matices, de detalles, que gana en cada escucha y que hará las delicias del oyente inquieto.