NUEVA MONARQUÍA.

NUEVA MONARQUÍA.

Nueva Monarquía logoNo descubro nada nuevo si digo que, históricamente, las crisis siempre han servido para al menos cuestionar una serie de conceptos que durante un tiempo indecente han ido estirando su fecha de caducidad. El modelo discográfico imperante lleva unos años en claro declive, pero el establishment, lejos de cuestionarse, lo que ha intentado principalmente es aferrarse al delgado hilo que le conecta con ese pasado esplendoroso que obviamente ya nunca volverá. No parece que esta sea una reacción coherente, pero sí la que exige menor reflexión, como una familia de alto linaje cuyos dispendios económicos haya provocado su venida a menos, incapaz de asumir su nueva posición actual. Si a la crisis del modelo añadimos la gran crisis económica en la cual nos hayamos inmersos, esa que transforma los derechos en privilegios y que echa mano de la tijera en todo aquello que considera prescindible -educación, sanidad, investigación, cultura-, parece lógico que se esté revisando cada una de las fases del modelo, desde la edición a la distribución, pasando, como no, por la financiación.

En este último punto, de un tiempo a esta parte ha venido cobrando fuerza un concepto, el crowdfunding, que pretende una búsqueda de nuevas fuentes de ingresos. Hasta ahora el usuario siempre había estado implicado en la parte final del proceso, como mero consumidor del producto generado. Pero el crowdfunding da un paso más allá e involucra a éste en su punto de partida, exponiéndole el proyecto, y responsabilizándole de su materialización. Esta es, en resumidas cuentas, la filosofía de este nuevo concepto que, en España, y a pesar de la cultura de lo gratuito y de los remiendos de nuestros bolsillos, ha dado lugar a casos exitosos, siendo el de «El Cosmonauta» (Nicolás Alcalá) el más sonado: la complicada financiación de un largometraje. Un hito quizá irrepetible por su aspecto novedoso, que ha sabido mantener de manera encomiable la llama durante un tiempo realmente difícil de mantener -la película, camino del cuarto año, aún no ha visto la luz-. Mucho más sencillo es, sin embargo, proponer un objetivo muy concreto y moderadamente asequible a corto plazo, a modo de colecta. Lánzanos es el portal que ha centralizado esta idea en España.

Bajo el autoritario a la par que esperanzador nombre de Nueva Monarquía nace en el día de San Valentín un proyecto romántico propulsado por los responsables del programa de radio independiente Salsa de Carne. Nueva Monarquía se nutre de los conceptos anteriormente mencionados para construir una nueva forma de asociación discográfica que, aparte de ser vertebrada por el sistema de crowdfunding hace acopio del espíritu asambleario para la toma de decisiones a todos los niveles, desde la elección de referencias venideras hasta el propio funcionamiento interno del sello colectivo. Tan sólo definen un punto de partida que se salta todas las reglas del juego y que sirve para esbozar, de algún modo, la línea estilística inicial. Ese punto de partida es el grupo toledano Computadora. El hecho de contribuir a financiar esta su primera referencia, ya te permite ser parte de Nueva Monarquía.

Para más información.

Compartir:

Comentarios

  1. […] de prensa Nueva Monarquía. Últimos comentariosBlog | lafonoteca.net » Nueva Monarquía on ManifiestoApoya el lanzamiento de Computadora. on ManifiestoApoya el lanzamiento de Computadora. […]