En los 90 en Galicia surgió un nuevo movimiento musical que recibió el nombre de rock bravú y en él se engloban un buen número de grupos que además de la utilización de la lengua gallega comparten un compromiso con lo rural y la cultura de la tierra, y en muchas ocasiones un carácter insurgente y crítico. Antón Reixa y Xurxo Souto (Os Diplomáticos de Monte-Alto) serían dos de los grandes líderes del movimiento y el periodista Xavier Valiño uno de sus principales ideólogos, recogiendo los principios del movimiento en su libro “A Paixón que Queima o Peito” (Edicións Xerais, 1999).
El movimiento recibe un gran respaldo por parte del programa infantil de la TVG Xabarín Club debido a la realización de múltiples videoclips que se emitían a modo de karaoke y que consiguieron que muchos de nosotros tengamos esas canciones grabadas a fuego en nuestra memoria. Grupos bravú como los Diplomáticos, Heredeiros da Crus o los propios Yellow Pixoliñas lograron un importante calado en los medios y el público gracias a que cada tarde miles de personas cantaban sus temas frente al televisor.
La banda surge en Monforte de Lemos, la bienquerida tierra del poeta Lois Pereiro, en el 87 con Tico -voz-, Ton -guitarra-, Juan -guitarra-, Tito -bajo-, y Xavier -batería-. Poco a poco se van haciendo un nombre en la ciudad y los bares comienzan a llenarse con sus actuaciones. Pronto comienzan los cambios en la formación, Juan abandona la banda entrando Manolo da Penela a la guitarra aunque rápidamente es sustituido por Franki y además fichan a Thierry que se encarga de los teclados. Corre el año 90 y con la formación cerrada comienzan a pulir un sonido heterogéneo en el que tienen cabida el rock, el punk, el ska y el blues.
En el año 92 firman con la discográfica Sons Galiza y lanzan su primer disco, “Galician People Speak Galego” (Sons Galiza, 1992). Con cortes como “Telexornal” y “Joao dopao” comienzan a asomar la cabeza. Nos encontramos con un estilo rico en matices que podemos denominar como agro-rock costumbrista o simplemente, rock bravú. Dos años después sale a la venta “Lacón Lover” (Sons Galiza, 1994) e incluyen la canción “Xabarín, xa te vin” en el primer recopilatorio del Xabarín Club,“A Cantar co Xabarín” (BOA, 1994) y “O home da bicicleta” en el segundo volumen, editado también por BOA en el 95.
En el 96 nos entregan su última grabación, “¡¡Non pises a Herba!!” (Sons Galiza, 1996). En ella nos encontramos con “Plantemos herba”, un corte que resume los principios de la banda: “La leche que vuelve a bajar / la carne que es rubia de más / el vino se congela y el aguardiente acabará declarada droga dura de consumo ilegal / Los pinos arden en verano / y las gallinas parecen sobrar / los cerdos también, por no lavarse / reconvirtamos el sector / plantemos nuevos vegetales… / plantemos hierba en abundancia (pero con denominación) / Los barcos no salen al mar / la tierra y los peces no van solos / el progreso que llega se podía marchar / si no hay dinero / de qué sirve tener donde ir a gastarlo”.
A partir de aquí la banda guarda silencio y no ha vuelto a tocar aunque algunos de sus miembros continúan ligados al mundo de la música, así nos encontramos con que Thierry y Franki tocan en Doc Magoo’s mientras Tico hizo durante una época lo propio con Lapanaback.
En el 2006 se celebraría un concierto homenaje a la banda en las patronales de Monforte que contaría con la participación de Xosé Manuel Pereiro –Radio Océano– y el propio Tico, genio y figura, que puso la guinda haciendo un despliegue de su peculiar humor y sus dotes surrealistas.
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