Paff Boom’s

La historia de Paff Boom’s se remonta a finales del siglo pasado. Por el mes mayo de 1997 cuatro amigos de Azuqueca de Henares (Guadalajara), alucinados con la escena mod de la época y fanáticos de Los Flechazos deciden que quieren ser protagonistas activos y no pasivos de esa escena. Ese deseo les llevará en un primer momento a crear el “Mod Henares Club” junto con unos amigos de Alcalá de Henares (Madrid), enfocado a la organización de eventos y conciertos. Y en una fase posterior, lo que es más importante, les lleva a formar un grupo. Sus nombres: Jesús Rodríguez a la batería, Emilio Calvo a la guitarra, José Luis Escudero a la voz y Paco Herrerías al bajo. Juntos forman el grupo que entonces nombraron como Los Vinilos. Ensayaban en la casa de Jesús pero su andadura musical se limita exclusivamente a un concierto que dieron en las fiestas de Azuqueca compartiendo escenario con los The Happy Losers, que presentaban en ese momento su primer disco “Make ‘Em Laugh” (Indiana, 1997). El repertorio de Los Vinilos era corto, se limitaba a una serie de versiones de grupos extranjeros (una versión instrumental del “Slow Down” de The Jam, el “So sad about us” de los Jam, “Me pregunto” versión en español de la canción “I wonder” de The Gants…), y patrios como el “Drácula ye-yé” de Doctor Explosion, y un único tema propio “La chica del tren” (bastante punk, según sus propias palabras). Para la posteridad queda la anécdota del concierto cuando José Luis (el cantante) se calzó una capa de vampiro en la interpretación del “Drácula ye ye” dejando impresionados a los lugareños.

Como buenos amantes de la música mod veían que la composición del grupo tenía una limitación clara, la inexistencia de un órgano para poder dar ese toque imprescindible para cualquier seguidor de la escena que se precie. Pronto pudieron solventar ese problema ya que incorporaron al grupo a Iván Gómez que, desde ese momento, se encargó de los teclados. A Iván le conocían porque coincidieron con él repetidas veces en conciertos, festivales y concentraciones mod a las que los componentes del grupo asistían. Como dio la casualidad de que también vivía desde hacía poco en Azuqueca, su incorporación fue sencilla. Con la nueva formación estuvieron ensayando unos meses pero pronto tuvieron que dejarlo porque José Luis y Jesús, cantante y batería respectivamente, abandonaron el grupo dejándolo sin la espina dorsal necesaria para subsistir. La cirugía curativa llegó de la mano de Luis Rodríguez, otro chico de Azuqueca, que pasó a tocar la batería a principios de 1998. El grupo quedó por tanto de la siguiente manera: Emilio (guitarra y voz), Paco (bajo), Iván (órgano) y Luis (batería).

El siguiente problema que tuvieron que afrontar fue el del local de ensayo, ya que el antiguo batería Jesús era el que los aportaba, con lo que al dejar el grupo se quedaron sin sitio. Tuvieron que utilizar el aula de música del colegio Giovanni Antonio Farina, en el que habían estudiado Emilio, Paco y Luis. Casualmente en la historia de esta banda los cambios de local de ensayo siempre han sido los causantes principales de los cambios más relevantes en el grupo. En este caso, era agosto de 1998 y con todos los acontecimientos ocurridos deciden cambiar de nombre. Atrás quedaron Los Vinilos ya que a partir de esos momentos pasaron a llamarse Súper 8. Ese mismo año, en el mes de septiembre, les surge la posibilidad de repetir actuación en las fiestas de Azuqueca, lo que les permitió además tocar en dos ocasiones durante el otoño – invierno de ese año 1998: uno en la «Peña Er Biberón» y otro en la Muestra de Músicos Locales. Para este último concierto reclutaron a Daniel González del grupo The Comebacks, que tocó la guitarra, pero que no seguiría después de la actuación.

Una vez asentada la formación con el nuevo nombre se centraron en depurar su sonido. Venía determinado por los aullidos lisérgicos del Hammond y la energía juvenil que emanaban los componentes. El repertorio lógicamente se apoyaba en muchas versiones de grupos referentes en lo musical como The Prisoners, The Jam y los citados Flechazos, de los que hacían una versión chirriante de su “Daño”. Completaban el set de canciones algunas composiciones propias como “Ya no sé”, “La chica del tren”, “Dime porqué” y “Venganza ideal”.

La actividad como Súper 8 durante estos años no es muy elevada. Se limitaba a ensayar en el aula del colegio incorporando al repertorio nuevas canciones. En cuanto a apariciones en público poco que destacar. Como confirma Paco: “Dimos varios conciertos en Azuqueca y en Guadalajara e incluso en la fiesta de fin de curso del colegio en el que ensayábamos. No veas lo divertido que era cuando te pedían un pasodoble o tenías que dedicar canciones a las chicas de 5ºB”.

Lo más reseñable desde el punto de vista público fue la aparición del grupo en un catálogo de grupos musicales que hizo el Ayuntamiento de Azuqueca en el que se decía: “Súper 8 surge a raiz del grupo Los Vinilos del que sobreviven Paco y Emilio. La actual formación se consolida en julio de 1998. Por el momento pocas han sido las horas de concierto pero muchas las de ensayos. Al más puro estilo garaje-beat, en las puertas del 2000, estamos seguros de que su directo nos trasladará a los años 60”.

El siguiente hito relevante en la historia de Paff Boom’s nos lleva ya a mayo del 2003, cuando deciden cambiarse el nombre al enterarse de que había otro grupo que usaba Súper 8. Paco nos explica cómo deciden pasar a llamarse The Paff… Boom’s: “El nombre surgió después de una votación en el aula de música dónde ensayábamos. Recuerdo que había otras opciones como The Lobsters, pero al final ganó The Paff… Boom’s, que al principio era con ‘The’ y los puntos suspensivos. El nombre nos gustó porque tiene mucho que ver con la estética pop art, los cuadros de Roy Litchenstein, la canción de los Yardbirds y con un montón de cosas más todas relacionadas con los años 60. Pero, sobre todo, porque hacía unos años (en 1995), La Ruta, que es uno de nuestros grupos favoritos de siempre, había publicado su primer disco con Animal Records y el título era ‘Paff… Boom!’ (Animal Records, 1995)Añade este contenido«.

Acorde al nuevo nombre crean un logo de la mano del amigo del grupo Francisco Núñez que, además colaborará a lo largo de su carrera artística en casi todos los carteles de los conciertos y grafismo y arte de los discos. Con independencia del nombre los ahora llamados The Paff Boom’s siguen cultivando el culto a la religión del Hammond. La pericia de Iván hace que el órgano fuera la piedra musical sobre la que se apoyase todo el estilo musical. Es tal el papel preponderante que incluso deciden en un momento hacer temas meramente instrumentales. En sus propias palabras: “Esto hizo que, dentro de los gustos musicales que siempre hemos tenido, fuéramos derivando en sonidos sobre todo basados en el groovie y el garage. En esta etapa apenas teníamos temas propios y el repertorio constaba básicamente de versiones de grupos como Big Boss Man y James Taylor Quartet”. Algunas de las versiones que hacían en directo eran “Bad Trip” de los Allnighters de Vitoria, “Humanize”, “Party 7”, “The Hawk” y “Everybody Boogaloo” de Big Boss Man; “The Stooge” y “The Spider” de James Taylor Quartet; “Stop in the name of love” de las Supremes pero en la versión instrumental de Los Flechazos y “South Avenue” de Graham Day & The Gaolers.

Ya en 2004 acontece otro hecho trascendental del período The Paff Boom’s asociado, cómo no, al cambio de local de ensayo. Dejan el aula de música del colegio y pasan a ensayar a El Foro, un espacio que tiene el Ayuntamiento de Azuqueca en el que cede locales de ensayo a los grupos del pueblo. Más allá de las condiciones técnicas de los locales el principal efecto que tiene este cambio es que el grupo comienza a entrar en contacto con muchas otras bandas y personajes ligados al mundo de la música. Una de estas personas que conocen es Clemente Vadillo (procedente de Torrejón de Ardoz), al que convencen en 2005 para que entre a formar parte de la banda, y cuya entrada pega un vuelco a todo lo anteriormente establecido en ella. Clemente procede de un grupo anterior llamado Plumkey (grupo de rock en castellano tirando a duro) y aporta un modo muy “callejero” de tocar la guitarra que les gusta desde el principio. Asume el rol de guitarrista y cantante, devolviendo a la voz un papel más destacado en el grupo. Con su entrada el reparto de roles queda de la siguiente manera: Emilio (guitarra), Paco (bajo), Iván (órgano), Luis (batería) y Clemente (guitarra y voz). Esta formación aguanta un tiempo y consiguen dar un par de conciertos uno en la sala Silikona de Madrid y en El Cibercafé de Azuqueca -un espacio que hay en El Foro en el que suelen dar conciertos los grupos locales -.

El reparto de tareas en cuanto a la composición de las canciones hacía que fuera un proceso un tanto laborioso. Paco lo explica: “Nosotros siempre empezamos componiendo primero la música. Normalmente se trata de melodías que trae Clemente y que luego vamos terminando entre todos en el local. Las letras siempre las compone Clemente. El proceso de creación de las canciones en nuestro caso es bastante largo porque lo hacemos entre todos. Eso aunque sea un poco más lento creemos que es mejor porque al final la canción es de todos y el resultado siempre resulta muy satisfactorio”.

Ya en 2007 Emilio, el guitarrista, deja el grupo. Con su salida también el estilo musical cambia. Paco nos lo explica: “A partir de ese momento empezamos a darle más importancia a los temas cantados, aunque los instrumentales en los que el Hammond era el protagonista seguían siendo la base del grupo. Seguimos dando conciertos más o menos con el mismo formato instrumental, pero poco a poco vamos introduciendo canciones cantadas, alguna versión de los Animals, Standells y el primero de nuestro temas propios con esta formación: ‘En la arena'».

Entre los años 2008 y 2010 la actividad del grupo se circunscribe a conciertos esporádicos en la zona del Henares a caballo entre Madrid y Guadalajara. Entre todos ellos destaca el que dieron en la Plaza de San Miguel de Azuqueca en junio del 2008 donde compartieron cartel con Los Imposibles. El repertorio en directo ha evolucionado incorporando nuevos temas propios (“Chelsea”, “Super 8”,…) pero manteniendo un bloque principal de versiones de canciones y grupos referentes, incluso se atreven con el “The KKK took my baby Away” de los Ramones.

En julio 2010 participan en la Scooter Run de Guadalajara actuando en la Sala Bumerang y hacen doblete en Madrid en otoño: en la Sala Caracol el 25 de septiembre y en la sala Soul Station el 22 de octubre. Ese mismo año por fin se deciden a grabar su primer disco. Después de 12 años de carrera musical, el sacar un EP demuestra que la prisa no es que haya sido una de sus compañeras. Paco lo reconoce: “Siempre hemos sido bastante perezosos y creo que el primer EP tendríamos que haberlo grabado mucho antes. Pero bueno, nunca es tarde si la dicha es buena… La verdad es que nos gusta mucho cómo quedó y creo que recoge bastante bien lo que era el sonido de The Paff Boom’s en esa última etapa”. El EP se titula como el propio grupo: “The Paff Boom’s” (Autoeditado, 2010) y se grabó justo después del concierto de la sala Caracol. La grabación del mismo la realizaron en los estudios Soul Kitchen el 23 y 24 de octubre de 2010 y contiene cuatro temas, uno de los cuales es una versión del “The Bird” que el grupo Manual Scan incluyó en su LP “One” (Hi-Lo, 1986).

Pero a finales del 2010, al poco tiempo de grabar el EP, Iván (el teclista) deja el grupo y, como nos indica Paco: “De nuevo nos tuvimos que reinventar, esa vez desde nuestras propias cenizas”. La marcha de Iván marca el fin de una etapa. La composición se resiente quedando: Paco (bajo), Luis (batería) y Clemente (guitarra y voz). Más allá del tema numérico, el principal escollo con el que se encontraron es que el estilo musical que tenían hasta ese momento venía muy determinado por el sonido y buen hacer de Iván a los teclados. Fuera Ivan, fuera los teclados… Con la marcha de Iván el grupo se quedó con un disco recién grabado con temas en los que el Hammond era el absoluto protagonista. El desánimo cundió en el grupo, como nos explica Paco: “Estábamos un poco desanimados y ni siquiera buscamos discográfica para editar el disco, así que lo autoeditamos y no salió hasta muy entrado el año 2011”.

El EP es muy representativo del sonido que, con Iván al teclado, habían alcanzado. Contiene tres canciones instrumentales y una cuarta cantada como reflejo de lo que fueron (“Super 8”), lo que son en el momento del lanzamiento (“Chelsea”) y da una pincelada de lo que serán (“En la arena”). La tirada es muy limitada (100 copias) que se vendieron rápidamente. A pesar del número reducido de ejemplares de la publicación lo que sí les permitió el EP fue tener cierta repercusión mediática, apoyada por el lanzamiento en abril de 2011 en su MySpace. En octubre aparecen en la web Telescopio Digital, sus canciones suenan en noviembre en programas de radio: en el «Plástico Elástico» (Onda Madrid) de Paco Pepe Gil y en el francés «Stoned Circus: Garage/Psychedelia Radio Show» pinchan “Chelsea”. Incluso tienen su momento de gloria con una entrevista en la televisión local de Azuqueca, Azuqueca TV.

Fueron en cualquier caso momentos de desasosiego en los que los restantes componentes del grupo no sabían por dónde tirar. En el Facebook del grupo encontramos una anécdota del momento: “En uno de esos días de ensayos de escasa motivación y falta de expectativas, de súbito, unos nudillos golpearon la puerta de nuestro local. Los tres nos miramos, desconcertados, no era habitual recibir visitas inesperadas. Al abrir, nos encontramos con tres o cuatro muchachas jovencitas, no debían superar los diecimuchos o veintipocos. Sin darnos tiempo a decir nada, una de ellas se adelantó con un tono y discurso resuelto: ‘Hola, estábamos aquí, en el local de al lado, y nos ha gustado mucho lo que estabais tocando. ¿Podemos escucharos un rato?’. La vida, a veces, cuando más perdido te encuentras, te envía señales, cuando no directamente ángeles en forma de adolescentes con el fin de insuflarte ánimos, de animarte a no desfallecer, a seguir adelante contra viento y marea. Estaba claro que debían seguir así que tomaron la decisión rápido: ‘Queríamos hacer temas propios cantados en castellano, sobre la base del trío guitarra, bajo y batería'».

Pero la rapidez en la decisión no significaba que su puesta en marcha no resultara algo más laboriosa. Estuvieron cerca de un año sin dar conciertos intentando sacar nuevas canciones para el repertorio y tratando de adaptar los temas instrumentales antiguos para hacerlos sin Hammond. Eso les llevo casi todo el 2011, y sólo a finales de este año, en noviembre, se atrevieron a dar un concierto en formato trío. Fue en Azuqueca y, para tan importante ocasión les acompañó Sergio Cerro (-Roger Sincero-), ex guitarrista de los Happy Losers, rememorando de alguna manera el concierto conjunto que dieron al principio de su vida artística cuando se llamaban Los Vinilos.

Sin embargo, las cosas cambian a principios de 2012 cuando conocen a Ángel Valbuena (saxofonista) y Leo Londoño (percusionista) que se incorporan al proyecto. Su incorporación les da mayor libertad de acción ya que las adaptaciones de los temas antiguos con Hammond las realizan con saxo y percusiones lo que aumentaba el aire groove de las mismas. Además les permite retomar las actuaciones en directo. El esquema es atractivo, como nos indica Paco: “Mezclamos una parte con guitarra, bajo y batería en la que tocamos algunos temas propios que ya íbamos teniendo con algunas versiones y una segunda parte en la que recuperamos los temas instrumentales que hacíamos con el Hammond pero adaptados al saxo y a la percusión”.

Durante parte del 2012 y a lo largo del 2013 el grupo, una vez asentada la nueva formación, se dedica a dar conciertos por toda la geografía ibérica, pasando por las principales plazas. No podemos calificar como gira a esta serie de conciertos, ya que se trata de desplazamientos puntuales. Paco nos explica el porqué: “Siempre nos hemos movido dando conciertos sueltos sobre todo por la zona del Corredor del Henares, Guadalajara y Madrid. Sólo ha sido en la última época justo antes de grabar “Derby” (Clifford, 2014) cuando nos decidimos a salir a tocar a otras ciudades de España como León, Vitoria y Barcelona. Nunca nos hemos planteado hacer una gira como tal porque nuestra situación personal no nos lo permite, pero dentro de nuestras posibilidades estamos intentando tocar todo lo que podemos. Además todo está muy complicado y es muy difícil que en un concierto fuera de la zona dónde vives, puedas llegar ni siquiera a cubrir gastos”.

Pues a pesar de los impedimentos comentados son capaces de tocar en enero en la sala Moby Dick de Madrid compartiendo cartel con los Chandall, en marzo en Vitoria, en mayo en la sala Costello de Madrid junto a The Seasongs celebrando el 15 aniversario de la banda, en junio en la sala Slow de Barcelona… De toda esta serie de bolos que da el grupo, hay dos que recuerdan con mayor cariño. El primero fue el que dieron en junio en Azuqueca, en casa, en la sala Back In Black que se corresponde al 15 aniversario de la formación. El segundo, a pesar de que la asistencia de público no fue numerosa, es el que dieron en León en la sala Retrovisor el 27 de julio. En este concierto Alex Cooper pinchó después de la actuación. Para unos fans acérrimos del artista leonés, que participara en su concierto y luego pinchara, fue uno de los momentos más agradables de su existencia, como nos indica Paco: “Siempre recordaremos ese concierto porque Álex tuvo el detallazo de subirse al escenario con nosotros para cantar ‘Now’ de los Plimsouls. Además el tío, después de concierto, estuvo pinchado hasta altas horas de la madrugada. Nunca olvidaremos aquella calurosa madrugada de julio, por su set bailongo y refrescante”.

La relación de la banda con Alex viene de lejos: “La cosa con Álex comenzó dándole la chapa. Literal y figuradamente. Algunos de nosotros le seguíamos y admirábamos desde la época de Los Flechazos, por lo que no perdimos la ocasión de regalarle una chapita con el logo de los Paff Boom’s y una copia de nuestro primer EP en cuanto tuvimos la ocasión, una noche de concierto de Cooper (en la sala Ocho y Medio de Madrid en febrero de 2012), excusa perfecta para acercarnos a él y conocerle personalmente. Comenzó entonces una relación de amistad que nos llevó, incluso, a tocar en León”.

Ya en octubre, y después de un directo en la Lennon’s Taberna de El Casar (Guadalajara), el grupo se mete a grabar lo que sería el segundo EP. Para su producción deciden contar con Carlos Hernández Nombela. La elección fue un tanto casual: “Casi por casualidad se cruza con nosotros Carlos en Facebook. Apareció en nuestra vida exactamente cuando tenía que aparecer, ni antes ni después. En un momento en que nos movíamos en la incertidumbre sobre nuestro futuro, su llegada a la vida de la banda fue mucho más providencial de lo que jamás pudimos imaginar. La recomendación llegó por parte de Álex Cooper, y un currículo impresionante, en el que destaca su trabajo para grupos como Los Planetas, Pereza, Cooper o Airbag, avalaba sobradamente su solvencia, por lo que quedaba poco más que discutir. Nos surge la oportunidad y en octubre de 2013 nos metemos a grabar «Derby» en los estudios Brazil de Rivas”.

El 25 de octubre comienza la grabación entre los Estudios Brazil y El Castillo Alemán finalizando el 14 de noviembre. La experiencia con Carlos fue magnífica fruto de la cual obtienen lo que a partir de esos momentos podemos clasificar como «sonido Paff Boom’s». Para la presentación de los temas nada mejor que su propio pueblo Azuqueca: en el Back In Black Rock Bar y más tarde en la Casa de la Cultura. Coincidiendo con la finalización de la grabación el grupo decide de nuevo cambiarse el nombre. En esta ocasión el cambio es menor. A partir de estos momentos se llaman Paff Boom’s, sin el “The” y sin los puntos suspensivos. Paco nos lo explica: “Nuestro estilo ya ha cambiado por completo y todos los temas que hacemos son cantados en castellano por lo que el ‘The’ nos parecía que sobraba. Estuvimos tentados de volver a cambiar el nombre por completo, pero la verdad es que ya nos conocía bastante gente de la etapa instrumental anterior y decidimos mantenerlo pero con esos pequeños cambios”.

El 2014 comienza con la intención de que el disco grabado salga a la luz. Como vimos, la grabación y edición se terminaron a finales de 2013, con lo que empezó el proceso de preparar la maqueta, buscar los contactos en las discográficas para mandársela con el objetivo de que alguna la publicaba. Todas estas tareas les llevaron hasta más o menos abril del 2014. De todas las discográficas que recibieron la maqueta el primero de todos en contestar fue Laureano de Clifford Records confirmando que estaba dispuesto a sacarlo. Y así lo hizo, “Derby” sale a la luz en octubre de 2014 cuando por fin editaron 300 copias en vinilo.

El disco contiene cuatro temas cantados en castellano, dejando atrás definitivamente las composiciones instrumentales. El sonido del Hammond anterior ha dado paso a un sonido mucho más puro de guitarras y melodías pop. Como anécdota queda el hecho de que de la sesión de grabación del disco queda un tema inédito que se titula “Un poco mejor”. El EP funciona muy bien y recibe buenas críticas, como las del blog de Álex Magicpop: “Hay debuts que, por sí mismos, ya implican la eclosión de la belleza propulsada por el entusiasmo de sus creadores. Discos que surgen, entre la vorágine de productos culturales, con una frescura que resulta muy reconfortante. Son trabajos minuciosos que nadie diría que son producto de la ilusión de unos principiantes porque sus responsables son muy capaces de expresarse con el buen criterio y la prestancia de unos excelentes profesionales. Personas que en realidad son como tú o como yo, pero que tienen el don de convencernos con su arte. Músicos que iluminan nuestro camino con el único propósito de colmar nuestros deseos al tiempo que nos agradecen, con toda la sinceridad del mundo nuestra indispensable fidelidad. Paff Boom’s son de esos grupos impactantes con los que, tras escuchar una de sus canciones, sabes que va a resultar fácil y agradable seguirles hasta donde haga falta”.

En verano de 2014 se une al grupo Paco Soto (guitarra) proveniente del grupo Sólo El Tiempo Dirá. La razón última fue conseguir que en directo las canciones fueran lo más fieles posible al disco. Con su incorporación la composición del grupo queda de la siguiente manera: Paco (bajo), Luis (batería), Clemente (guitarra y voz) y Paco Soto (guitarra).

Justo después se lanzan a la grabación de un videoclip para su “Nueva York”. Lo hacen en septiembre de 2014. El encargado de su realización es el amigo de la banda Francisco Guardado (de Bajolapiel Producciones). Se trata de un montaje bastante sencillo en el que el grupo aparece cantando la canción mientras se proyectan sobre ellos y la pared del fondo imágenes de la ciudad norteamericana que da título a la canción. Se presenta en el concierto que el grupo dio en diciembre en la Casa de Cultura de Azuqueca.

Desde este momento hasta final del 2014 se dedican a dar conciertos aprovechando el tirón de la publicación de “Derby”. De esta manera tocan en el Festival de Azuqueca de Henares en el campo de futbol del pueblo abriendo el cartel que comparten con grupos como Love Of Lesbian o Vetusta Morla; graban una sesión acústica para Radio Castilla La Mancha dentro del programa “A la Vuelta de la Esquina”; actúan en la sala Barracudas de Madrid junto a Solo El Tiempo Dirá y en Azuqueca, saliendo en la televisión local…

El 2015 comienza igual que finalizó el 2014, con una actuación teloneando a los Mutagénicos en la Sala Moby Dick, participando en el Pink Festival de Linares y apareciendo en el programa de televisión «Punto y Pelota» de Intereconomía TV. Son buenos tiempos para los alcarreños. El grupo está lanzado agotándose todas las copias del EP.