El detonante que desencadenaría la formación de Carne es un concierto en la Facultad de Bellas Artes de Granada en 2012. Jorge (guitarra) propone a Miguel (bajo) y Patricia (voz) que estudian también con él en la misma, montar una banda para tocar en unas jornadas organizadas en la universidad. Jorge y Miguel se conocen bien porque ambos militan en La URSS, mientras que Patricia fue todo un descubrimento el día que fueron a ver el grupo en el que cantaba: «Siempre he tenido debilidad por las bandas de vocalistas femeninas (Avengers, X, Ultimo Resorte, Desechables, etc.) y desde hacía tiempo me rondaba la cabeza la idea. Así que un día fui a un concierto de A Raura Ura y me prendó la voz de Patri«.
Para la batería piensan en Miguel Baketas, que tocaba en Barrakera. Recién llegado de Inglaterra y con ganas de volver a la actividad musical que tuvo que dejar aparcada cuando se fue al extranjero recibe la oferta de unirse al nuevo proyecto encantado.
Tras un par de ensayos debutan con el nombre de Cuarteto de Cuerda en Do Menor Justicia de Dios. La actuación consistió sobre todo en versiones aunque quedó hueco para algún tema propio: «Allí estábamos, en la plazoletilla de la antigua biblioteca de Bellas Artes con un par de ensayos encima. Había limonada y gente sorprendida de que yo cantara -por entonces era una chica muy reservada-; ese día nos ganamos grandes fans, creo. Sólo tocamos versiones, pero como eran versiones muy veraniegas yo me lo pasé muy bien«, rememoraba Patricia.
El caso es que la experiencia lejos de desanimarla confirma las ganas de seguir en serio con el proyecto: «Ya que La URSS es un proyecto desde la distancia, en una ciudad como Granada se hacía imperante la necesidad de montar algo para no morir de aburrimiento«, comenta Jorge. El resto no encuentra más que argumentos a favor. Baketas: «Venía de tocar en grupos más rockerillos en los que siempre me faltaba algo de caña«, seguidor confeso de La URSS y de la labor de diseño de carteles y portadas desarrollado por Miguel y Jorge. Patricia, por su parte, accidentalmente en el puesto de cantante de A Raura Ura tras un ensayo de prueba, reconoce el apoyo desde casa: «Mi abuelo canta copla y mi padre flamenco; ellos dicen que sé cantar y a mí me congratula«. Como nombre definitivo para el grupo se inspiran en el que tenía elegido Jorge para un fanzine que nunca llegó a editar: M.E.A.T.: «Como no se me ocurren casi nunca buenos nombres, me lo reciclé para el grupo«.
Cuando se les pregunta por el sonido que se buscaba para el grupo, mencionan sobre todo la conexión general que existe entre ellos con la música que escuchan como uno de los factores que facilitaron el entendimiento en el seno de la banda para plantearse «música simple, espontánea, criminal y oscura, la premisa era que sonara ochentero pero arcaico, algo básico«… A los nombres ya mencionados de grupos con vocalista femenina, se unen el de Siouxie & The Banshees y grupos punk clásicos como K.G.B., Escorbuto Crónico, La Banda Trapera del Río, Dead Kennedys, 999…
Al poco tiempo Patri se va a Grecia y deciden sustituirla por Gema en lo que está fuera. A su vuelta, entre 2014 y 2015, se reúnen para decidir acerca del grupo y acuerdan, para reforzar su sonido, incluir una segunda guitarra, por lo que incorporan a Limón -Miguel Vargas- (también miembro de A Raura Ura). Junto a la interinidad de Gema, la única variación en la formación de la banda vino con sustituciones puntuales como las de Paco (Los Llorsairs) a la batería por ausencia de Baketas en el Playa Hardcore de Almería.
Estabilizado el grupo empiezan a intentar grabar sus primeros temas. Intentaron hacerlo en el instituto Albaycin, donde estudiaba Álex, técnico de sonido cercano al grupo, pero la experiencia no funcionó por la negativa de los profesores de éste. Finalmente lo terminan registrando todo en febrero de 2014 en el centro social ocupado y autogestionado 15 Gatos donde ensayan. De las cuestiones técnicas se encargan Álex y Limón, que tiene cierta experiencia en la autoproducción por las bandas donde ha tocado o ayudando a otros: «Fue una auténtica pasada. Lo grabamos con mi equipo y cuatro cosas prestadas (…) Fue totalmente en digital y empleé mis mejores conocimientos. Lo mejor es que no lo hicimos con prisa, a falta de medios, siempre queda el tiempo y hacerlo con todo el cariño posible«.
Jorge también recuerda con detalle la grabación del disco: «Fue un puto hito teniendo en cuenta las circunstancias en las que lo hicimos. Para empezar, ensayos, los mínimos, para no variar. El lugar era un cuartucho que estuvimos arreglando los meses previos a grabar para que no se le cayera un muro o se hundiera el techo«. Dedicaron un día para las bases (baterías y bajos), otro para guitarras y arreglos, y destinaron el tercer día para las voces. Las mezclas, realizadas entre Jorge y Limón, fueron resultado de un proceso que involucró la escucha una y otra vez de forma obsesiva de todo para intentar identificar cualquier fallo: «Todo el proceso fue muy espontáneo, pero las mezclas y la masterización fueron intensas, queríamos apretar el sonido al máximo: una batería con un beat que sonara sintética, un bajo súper comprimido y potente, guitarras atmosféricas con chorus, voces con reverbs y delays…. ciencia ficción, pero salió bastante como planeamos«.
En un principio se pensó en dar salida a lo grabado como maqueta, en una cinta de cassette, pero Paco, responsable de la tienda de cómics Subterránea en Granada, les ayuda con los gastos de la edición en vinilo. «Carne» (La Corporación, 2015), con siete temas que no llegan a los quince minutos, representó un debut más que digno. Ramalazos de after punk enérgico con poca propensión a atmósferas volátiles y que acaba con una versión de Siouxie en su momento más rabioso.
Entre sus directos destacan su participación en abril de 2014 en el Los Viernes Bonsais en Granada con ocasión del evento «Cosas Que Hacen Punk», donde tocaron con Los Llorsairs, Carmonas, The Pennycocks, Futuro Terror y Copycats. Un mes después, tocarían en el mismo CSAO 15 Gatos con Los Crudos y Mierdä que terminó con despliegue policial, o en mayo de 2014 en el festival de La Corporación celebrado en el Rock Palace de Madrid junto a Rata Negra, Nueva Autoridad Democrática, Antiguo Régimen y Ciudad Lineal. Pero quizá sean las veces que tocan en Sevilla los conciertos de los que guardan un recuerdo especial, dado el buen ambiente que encuentran allí: «En Sevilla hay un movimiento interesante ahora, se lía bastante y eso siempre es la ostia, ver la respuesta de la peña cuando sales a otro sitio a tocar«, afirma Baketas.
Emplazados dentro del movimiento de bandas que agita el sur en la segunda década del siglo XXI, Carne ha participado en el festival que organizó Andalucía Über Alles, colectivo que de alguna manera aglutina todo ello en diciembre de 2014 y en el que tocaron con Copycats, Sputnik Veneno, Perros del Desierto, Filos, Antirocker’s…
Preguntados acerca del futuro Jorge avisa del que el proyecto salió sin pretensiones concretas: «Fue una banda para mantenernos activos, pero el hecho de empezar a salir fuera a tocar, la grabación y el proceso de creación del disco y todas esas cosas, nos han unido mucho y creo que para todos se ha convertido en algo muy especial«. A pesar de la dispersión a la que obliga el tener que ganarse la vida en donde se pueda, hablan de tener ya la motivación suficiente para seguir componiendo temas nuevos.
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