Maxi que supuso todo un acierto para Speed. Grabado como siempre en los estudios Tsunami con Josean López a los mandos, permitió al grupo conectar con un público más amplio gracias a la irreverencia y cachondeo que parecían destilar especialmente en la canción que daba título al disco.
Compuesta a propósito de la entrada de España en el Mercado Común Europeo el tema ironiza con lo bien que nos iba a ir desde entonces, con todas las ventajas que dicha incorporacion traía para el país. Ya habían hecho algo similar para tratar de tirar por tierra los fastos que las instituciones tenían preparados para el año 1985 en la canción «El año de la juventud«, que aparecería tanto en el LP «Speed» (Victoria, 1985) como en el sencillo editado para acompañarlo,«1985» (Victoria, 1985).
La portada de Roskow, hermano de Iñaki «Fisuras» Huarte, el guitarra de la formación, muestra lo «mejor» que puede ofrecer el país al exterior: encierros de San Fermín, Guardia Civil, procesiones de Semana Santa, chulos agitanados de pelo en pecho, toreros, txarangas, un punki, un encapuchado con un bazoka en mano….
En similar actitud, vestido de torero, se mostró Ramón, el cantante, cuando interpretaron el tema, en consabido play-back, eso sí, en el programa de televisión Tocata. Tras quitarse de enmedio las preguntas que le hicieron antes de la actuación con respuestas sin sentido, saltó y corrió por el escenario mostrando el dedo a la cámara. La sorpresa del público del estudio es la misma que provoca la canción. Mezcla del gamberrismo de combos como No Me Pises Que Llevo Chanclas o Los Inhumanos (cuya versión extrema era la que facturaban ccon el proyecto en paralelo Gamberros Unidos) y de la crítica que se destilaba en Euskadi en los años 80.
En parámetros de irreverencia incluso mayor parece compuesta «La banqueta«, una canción dedicada a una banqueta que «está más buena que Carmen Sevilla«, y con la que se puede practicar sexo: el agujero en el centro es, como muestra bien a las claras el dibujo de Roskow de la contraportada, para eso, para meterla. El taburete o banqueta en cuestión era pieza de atrezzo fundamental en las actuaciones de la banda cuando interpretaban este tema.
Siendo ambas buenas muestras en lo musical de punk-rock o rock acelerado, donde los donostiarras parecen afilar especialmente su vena sarcástica, de ataque más directo es en las dos canciones que cierran las dos caras. En la primera «Locos«, en la que cuestionan la política de ingresar en psiquiátricos «a unos pocos cuando aquí estamos todos locos«. Parábola de individuo frente al poder arbitrario del sistema que Ramón interpretaba con un embudo como sombrero en sus conciertos; o al menos así hizo en el que dio la banda en los Conciertos de Radio3 en televisión. La canción suena menos acelerada que su compañera de cara o de la ya comentada «La banqueta«, y se sustenta en un ritmo pegadizo
«Por culpa del Gobierno» pone el dedo en la llaga al denunciar la permisividad histórica e institucional con respecto al alcohol. Droga legal socialmente aceptada que ha destrozado la vida del protagonista de la canción. «Por culpa del Gobierno estoy enfermo / Por culpa del Gobierno me fui al infierno«. Comienza contenida y va haciéndose enorme, con una línea de bajo más que notable, y en la que la voz de Ramón, desquiciada por momentos pone el punto justo para intensificar la crítica.
Tanto en la cuestión de los locos y demencia como en la del alcohol volverían los donostiarras en trabajos posteriores.
Aquí viene mi propuesta: es el mejor disco de Speed. Si resulta excesiva calificación para un trabajo de tan corta duración permítaseme hablar entonces de cuatro de los mejores temas del grupo.