Espectáculo turístico en idioma autóctono con mucha bulla y pocas preocupaciones por la armonía, la melodía, la ejecución, la dicción y otras tonterías musicales. Chunda chunda por un tubo en ambas caras basadas en dos temas populares de las Islas Baleares. No fueron los únicos isleños en explotar la veta folclórica: Los Valldemosa, Los Javaloyas y otros hicieron lo propio.
Los pretendidos temas folk aparecen trufados de elementos espúreos y es fácil distinguir en ellos pasajes de “Oh, Susana”, “Desde Santurce a Bilbao”, “La polca del barril” y otras canciones de chusma similares.