Este tercer EP constituyó el primer pequeño éxito comercial de Los Mustang y su nombre y su música comenzaron a sonar por toda la nación.
“Todos los chicos y chicas” es una preciosa canción en principio pensada para una voz femenina como la de Françoise Hardy, pero Santi y su gente hacen una buena versión que se escuchó bastante en las emisoras con aquel remoquete de locutor barato que afirmaba que esto era ejemplo de que los chicos también pueden ser románticos.
Junto a los chicos y las chicas del tema principal, una versión del popular “My Bonnie”, único triunfo de aquel Tommy Sheridan al que acompañaban en Hamburgo unos desconocidos Beatles. El resto, un instrumental de guitarras: “Tiger tears” y una versión de un tema relativamente popular en esa época titulado “Mi talismán”, que había sido grabado por el también catalán Tony Vilaplana.