Poco antes del verano de 1973 y para seguir la racha triunfal de los anteriores sencillos, aparece éste, que servía de avance al LP “Camilo Sesto” (Ariola, 1973) que se publicaría a la vuelta de la campaña estival. El triunfo no se hizo esperar y «Todo por nada» ocupó durante tres semanas el número uno absoluto de ventas de singles y otras dos en cabeza de la lista de popularidad de Los 40 Principales. A pesar de no ser una pachanga fue una de las canciones más vendidas y escuchadas aquel verano, solo superada por el bikini de rayas que Fórmula V le había puesto a «Eva María».
Sin duda, otra de las grandes canciones de Camilo Sesto, totalmente de lleno en su estilo lastimero en las estrofas y de desbordada potencia en los estribillos. Una buena composición que no ha envejecido tan bien como otras canciones suyas, lo que no impide reconocer que su triunfo fue totalmente lógico y que supuso otro importante eslabón en la cadena triunfal en la que comenzaba a convertirse la carrera de este cantante, que en menos de dos años se había convertido en una de las voces españolas más importantes.
En la cara B se colocó una canción en inglés. Ritmo marcado, una guitarra vacilona y unos coritos góspel en una de esas canciones con las que Camilo demuestra cuál era la música que a él realmente le gustaba.