La irlandesa Dana ganó el premio de Eurovision 70 con una de las más bellas canciones que han pasado por este certamen. “All kinds of everythyng” es una balada mágica que nos mete en un cuento de hadas. Cristina la trae al español y nos muestra una faceta poco vista en ella, la de un suave romanticismo, casi en un sueño infantil, alejada de la potencia un tanto desgarrada que generalmente la caracteriza.
“Concierto para una voz” no se queda atrás. Cristina lo desarrolla como un canto en leves onomatopeyas, en la que repitiendo las mismas sílabas, entona la melodía. Una voz que imita un instrumento musical y es contestado por una sección de cuerda. Es decir, todo un concierto clásico, que solo al final incluye palabras que se funden con los violines. Un tema muy original en su concepción y que fue tanto o más escuchado y apreciado que su vecina eurovisiva de la cara A. De hecho en las listas de éxitos de la época, es ésta la canción que aparece en representación de este single.
El disco entró tímidamente en las listas de ventas y, en mi modesta opinión, es el mejor sencillo de toda la carrera de Cristina, que esta vez apostó por la calidad y no se equivocó.