Unos Javaloyas que cada vez sonaban mejor en directo (experiencia no les faltaba) afrontan el último vinilo del 64 con un guiño al sonido Tijuana de Herb Alpert y sus muchachos. Bailable y contagioso con toques sincopados de trompeta, órgano juguetón y cantado a varias voces como casi siempre hacían ellos. Una pieza facilona y efectiva a la hora de llenar las pistas de baile.
“Sally, go round the roses” había sido grabado por unos desconocidos The Jaynettes en la onda Beach Boys. Un tema con el que no acaban de acoplarse y con el cual quizá se complican en exceso tanto vocal como musicalmente. La grabación con una batería de lata a alto volumen tampoco es ninguna maravilla.
La pieza rítmica es el rock clásico de Bill Haley “Skinny Minnie” bastante bien trabajada en los instrumentos y mas gritada que cantada por Luis. Buenos detalles de la guitarra y saxo fuera de tono en su breve aparición al final del tema.
Completa el disco el por entonces inevitable Adamo a ritmo de vals en un tema poco conocido de este autor y cantante. Interpretación mediocre y grabación deplorable.