«Sangre en el Museo de Cera» (Tic Tac, 1982) representa un salto cualitativo respecto al primer EP del grupo, e incorpora registros que no se adivinaban en «La Amenaza Amarilla» (Tic Tac, 1981).
Así queda atestiguado en la canción titular, donde Joaquín vuelve a jugar con los recursos macabros y la música le sigue el juego. “Sangre en el Museo de Cera” incurre en el siniestro patrón Cramps y constata que no todo es registro punk en la banda.
El baño de ketchup da paso a “Pasión por los Decibelios”, un pop sesentero que acelera en el estribillo. La convencional letra, sobre la adicción a la música juvenil, es de Arturo.
El nivel crece aún con “Venganza”, un esplendoroso canon punk que pide directo y nos despliega a toda pastilla la primera letra historicista de Joaquín: “La Armada Invencible es invencible / Felipe II es indestructible”. La socarrona invención de un desquite Imperial es, sí, irresistible.
“Gammaglobulina” cierra el EP y es, vaya sorpresa, una ramonada sin disimulo -el título lo dice todo-. Joaquín enluce la maquinaria punteando en lugar de abusar del manido riff.
Y funciona.