Debut en vinilo de La Fe, grabado en su local de ensayo del Rock Palace los días 29 y 30 de diciembre. José María Rubio ofició de técnico de sonido, quien también se encargó junto al grupo de las mezclas. La masterización fue cosa de Ramón Moreira (Krater) en los estudios DGR Sónica.
Editado por Blondes Must Die Records, el cartón que contiene el disco tiene hueco inicial aunque la banda no resistió a una serigrafía artesanal del título. En el interior, una hoja pequeña doblada en el que se dan detalles de la grabación y las letras de los dos temas.
Letras las dos sofocantes. Una sobre una claustrofóbica existencia de trabajo bajo tierra («Ocho horas bajo tierra«) y la otra de áspera crítica hacia el círculo de falsedad que te rodea («¿Qué dirán de ti?«).
Arranca la primera despacio, apostando por una amenazante oscuridad que no terminan de consumarse quedando en una continua y asfixiante insinuación a base de guitarrazos.
Más decidido y enérgico se muestra el corte final. Todos los detalles en el sonido de la grabación apuntan en la misma dirección lo-fi y sucia: acoples, reverberaciones y un aparente apantallamiento de la voz. Si en «Ocho horas bajo tierra» uno puede pensar en títulos clásicos del afterpunk acerca de enterramientos en vida y existencias de sarcófago, para la historia narrada en «¿Qué dirán de ti?«, valdría el simil con el «Ni una sola lágrima» de Golpes Bajos.
Sencillo con muchas bazas para convertirse en pequeño objeto de culto de los seguidores, no sólo de La Fe, sino de los demás proyectos en los que andan y anduvieron sus componentes.