El primer trabajo de Malandrómeda son once cortes punzantes que establecen las bases de todo lo que vendría después. Costumbrismo, realidad cotidiana, vanguardia y cadencia old school se dan cita en cortes como “Ta chovendo merda” –“A merda trae merda coma os cartos traen cartos”-… una pesadilla que convierte una aparente tranquilidad nerviosa en un episodio casi psicótico en el que la luna se convierte en un ojo amenazante y todo lo que nos rodea produce asco y miedo.
“Apura” y “Os señores da guerra” –cuenta con la colaboración de Sokram (Dios Ke Te Crew)- llegan con bases incisivas y ritmos cercanos al hardcore. “Aquel grupo” nos cuenta la historia de Lucas Mc, rey del ragga y de la rima improvisada. “Oasis” es un corte más íntimo que recuerda a posteriores desarrollos que encontramos en Fluzo y en trabajos posteriores de Malandrómeda. Se trata de uno de los mejores cortes del conjunto.
Destaca “Noite” por sus bases y ritmos elaborados que se diferencian del resto. Bases con cadencia de odisea futurista a lo “Blade Runner” (1982), y una producción en las voces más trabajada. “Dúas tintas” trae realismo urbano salpicado por luces de policía, tazas de ribeiro y scratches.
Un trabajo que deja entrever el luminoso futuro que llegaría después. Una formación en evolución con mucho margen de mejora.