Uno de los temas más descaradamente horteras del grupo para cerrar el año y unas cifras de ventas que lo mantienen como el mejor vendedor del mercado nacional del disco. El single se abre con un pasaje de algo parecido al himno inglés para entrar, a renglón seguido, en una estrofa de ritmo facilón y un estribillo entre vulgar y matemático. Sólo la fama que gozaba el grupo y el rebufo del éxito del anterior disco puede explicar que este tema llegara a estar en el top 5.
Paco Pastor también componía ocasionalmente, y ésta es una de esas ocasiones. Aires de romería y acompañamiento simple presidido por la percusión para una canción que recuerda a alguno de los temas que encumbraron a Andrés do Barro.