El disco de debut de Aiala contiene planetas. O al menos eso es lo que sale cuando lo abres y sacas, separadas en cartas diferentes, un cuerpo celeste para cada una de las canciones y sus letras. La invocación astral se anuncia ya desde el diseño gráfico de la portada, que corre a cargo de Carlos Undergroove – Dabunker-, mientras que de la representación de los planetas se ha encargado Quim Moya.
Gestada la colaboración entre los dos componentes principales del proyecto, Jara e Isaïes, desde la escuela de música a la que van, con el previo de una banda de versiones, Aiala está listo para despegar cuando las canciones de la maqueta que preparan en septiembre de 2018 en La Panchita convencen al sello Kasba Music. La labor de completar el material para preparar el LP se realiza en los primeros meses de 2019.
Trabajan un amplio crisol de posibilidades sonoras que giran alrededor de R&B electrónico, neo-soul y elegante lounge. Todas ellas opciones tratadas con un denominador común, el de la suavidad.
Tejen atmósferas etéreas y flotantes, que asemejan en algunos momentos a las de aquel trip-hop británico que tenía a Massive Attack o Portishead como abanderados. En el apartado de las voces, uno recuerda escuchando este «Nothing Less Than Art», a Dido o a la NawjaAñade este contenido electrónica.
Encuentran momento para la reivindicación en «Quiero sentirme iluminada» (adaptación de un tema de La Kinky BeatAñade este contenido) a la que confieren esa determinación de no tener ni Dios, ni partido, ni amo, ni marido. Pertinente puntualización, poniendo de manifiesto esa conexión femenina que lleva, por ejemplo, a hacer de «Red temple» un tema en el que la menstruación, el color rojo y ese espacio íntimo reservado de la mujer, juegan un papel determinante.
Proponen la conexión mediterránea, la comunión con el tablero celeste en el que se evolucionan los astros y todo ello con una alegría y luminosidad de fondo que impregan todo el álbum. Añaden pinceladas de dub, trap y algo de flamenco.
Trabajaron principalmente en La Panchita, con Chalart58 al cargo de las cuestiones técnicas. Únicamente salieron para desplazarse a Stereodosis donde Jara grabó voces con Sepe.
Numerosos colabadores: Clara Peya puso voces, grabadas en el Beat Garden con Pau Romero; Sister Castro hizo lo propio en «Only one«; Francisco Guisdo «Rubio» aportó guitarra en «These games«; Clara Peya el piano en «All«, y finalmente Celia del Barco y MatahAñade este contenido aportaron voces en «My essence» y «Make a good face«, respectivamente.
Disco completo, lleno de matices y que hace de Aiala un grupo al que da ganas de ver crecer.