Dos temas propios para un debut con poco brillo. Canciones de autor que investigan en la forma de componer de Joan Manuel Serrat, apoyándose en un cierto parecido en el timbre de voz.
Canciones de amor cargadas de guiños íntimos con buenas letras y arreglos musicales algo acartonados. La cara A bulliciosa; la B, relajada. La primera con flautas y violines de urgencia juguetona; la segunda, un piano calmo y una cuerda indolente.
Un nuevo cantautor salta a la palestra y eso poco parece importar a un mercado algo sobrecargado de productos similares.