Mi Regreso

Alejado definitivamente de la producción y arreglos de Fernando Arbex y fuera del paraguas protector de Ariola, Micky debe buscarse la vida en un sello menor, Marfer. Por otro lado, con 37 años cumplidos busca agarrarse a la modernidad ochentera casi desesperadamente.

Para ello hace un LP ecléctico, donde conviven el rock, el blues, el tango y hasta la salsa, como demuestra la canción que abre el tema, la sabrosona y rítmica “Como baila Marujita”. Desde luego, la tal Matujita no es la mejor ni la más popular de este trabajo con el que Micky inicia el resto de su vida. Probablemente, ese puesto pertenece a la ocurrente “Micky no es un ratón” con la necesaria dosis de histrionismo y la dicción cabreada de Micky sobre un fondo cercano al tecno con un inquietante teclado monofónico dándole la réplica entre el coro burlón de ratitas presumidas repitiendo el título del tema. En la misma onda se mueve su autohomenaje titulado “El Hombre de Goma”, un rock and roll con buenas guitarras y fondo repetitivo. “Es el hombre de goma que regresa ya”, toda una declaración de principios de quien se niega a tirar la toalla.

“La guarida de Miguel” es una revisión del tango clásico “Hernando´s hideway” con teclados imitando el acordeón y algún toque de castañuelas. Es un número en el que Micky explota su bis de showman. No es la única versión que aparece en este LP. Con “Ya tengo todo”, Micky Carreño vuelve a sus tiempos del Price, donde enervaba a los primeros seguidores del rock con sus desaforadas versiones de Ray Charles, como es el caso de esta de “I got a woman”.

La discoteca de aromas sofisticados viene representada por “Up side down”, que comienza de manera prometedora con vientos y ritmos complejos para ir decayendo hasta convertirse en un peñazo. “El blues de la parida” viene perfectamente definido por su título y poco más ofrece este regreso, que no gozó de demasiada promoción y con el que Micky se quedó a medio camino de sus propósitos.

En la grabación trabajaron varios de los mejores músicos del momento, como Carles Benavent (bajo), Johnny Galvao (guitarra), Kliftus (piano y teclados), Javier de Juan (batería), Medrano (trompeta), Tito Duarte (saxo), etc.

Dedicado a sus programas radiofónicos y a colaboraciones televisivas, Micky se tomaría a partir de aquí unas largas vacaciones de casi diez años, interrumpidas con algunas grabaciones esporádicas en sellos independientes.