Disco en el que Los Catinos evidencian cansancio y estar en el ocaso de su carrera. “Me gustaría que me quisieras” es una balada monótona y bastante tontorrona en la que el grupo transmite un cierto aburrimiento, a pesar de la bondad de la melodía original.
En la cara B un tema de aquel antepasado del tecno llamado Giorgio: “Hoy mañana será” con el que el grupo nos muestra su cara más rítmica y hasta se atreven a distorsionar la guitarra y remarcar los elementos rítmicos, otras veces casi desaparecidos. También el órgano muestra sus registros más asilvestrados. Una pieza cuando menos curiosa para el oyente del s. XXI.