Belter experimentó con Los 4 de la Torre un nuevo formato, el disco single. Abarataron gastos con funda de papel impresa a dos colores, vinilo más delgado, dos únicas canciones de pachanguería manifiesta… y la cosa funcionó. El fraternal grupo logró meterse en los primeros puestos de las listas con una canción tontorrona de José Luis Navarro, cuya frase culminante era «Mamita, si pregunta por mí, dile que no estoy». La canción de marras fue presentada en sociedad fuera de concurso en el Festival de Aranda de Duero y enseguida constituyó un incuestionable triunfo de la ramplonería musical.
En la cara B, un tema racial y cañí con el que el conjunto comienza su colaboración con Ricardo Ceratto, un argentino que lideraba entonces a Los Quando’s, otro de los grupos aspirantes al título de peor conjunto de la década. Esta cara B se escuchó tanto o más que su compañera. Ambas fueron pronto editadas en EP y encabezaron el primer LP del conjunto.