Max Gamuza debuta con “Los Buenos Momentos Están Aquí” (La Lengua Armada / Munster, 2012), LP ideado y escrito por Busta Spector, el cual maneja una propuesta tan clara como amplia. Con la inestimable labor de Mike Mariconda a los mandos y acompañado por una troupe de versados músicos, Busta construye un álbum de esos que se dicen directos: compuesto en su mayoría por canciones breves, rápidas e intensas que prescinden de artificios. Desde luego, el disco se abre golpeando fuerte con “Moni”: “Trabajé en el puerto, trabajé en la mina; todo fue muy duro a base de anfetamina”. A esta siguen, a cuento de la mencionada amplitud, la bluesera “Conquistando la vida” y el power pop “Balas perdidas”. Todo ello casa gracias al desparpajo con el que Busta interpreta sus canciones a través de una actitud que bebe mucho del punk y el rock urbano nacional de los 80.
La mucha experiencia que en conjunto y por separado reúnen los intérpretes del disco se evidencia en la perfección con que tocan cada palo del rock, habiendo sitio para el esparcimiento de cada uno -destacan especialmente los solos de Íñigo, como en “Árboles” o “She” (única canción en inglés del álbum)-, pero son las de corte más power pop las que resultan mejor paradas en el conjunto global, la ya mencionada “Balas perdidas” y “La cita”, probablemente porque recogen diáfanamente el espíritu divertido (que no cómico) y vital que de un modo u otro recorre el del disco.
“Los Buenos Momentos Están Aquí” no es un debut cualquiera; es la obra de un rockero de toda la vida que conoce bien el género, sabe ir a las raíces del mismo y traerlo fresco como el primer día.