Tras el buen comportamiento de “Buenas Noches” (Ariola, 1970), se albergaban grandes esperanzas en este tercer single. Sin embargo, no funcionaría demasiado bien en las tiendas, a pesar de la calculada comercialidad de la canción principal. Una canción con el sello inconfundible de su autor, Juan Pardo. Una especie de himno festivalero que no llegó lejos.
Para la cara B, se escogió una canción del propio Camilo Blanes con un arreglador y un tratamiento muy distinto a su hermana de la otra cara. “A ti, Manuela” ya suena a las canciones de Camilo de toda la vida. Voz queda, instrumentación de cuerda en notas largas subrayando la melodía, ese quejido con melismas tan típicos de este cantante y ese crescendo con el que el tema va ganando en empaque y épica. No es ninguna maravilla, pero ya marca lo que enseguida iba a ser su estilo interpretativo.