El cambio de sello sienta bien a Els 5 Xics, que ahora son siete. La entrada de un potente organista, de un dúo de saxos y las mejoras de condiciones de grabación, a pesar de que siguen vistiéndose con los retales horarios que dejan grupos con mas nombre, le han dado un nuevo sonido a la banda.
La cara A es una balada romanticona con el cantante contándonos sus tópicas penas amorosas sobre un fondo omnipresente de órgano, intervenciones puntuales de los saxo y poco más que reseñar. En todo caso, la mejora de José Manuel Ballester, cada vez más seguro y más atrevido vocalmente.
La cara B es para un tema del más clásico rhythm’n’blues cantado en inglés con el añadido de un barítono gruñidor y un ritmo medio bien marcado, adornado por contratiempos y riffs de los vientos. Buena lectura de un poco conocido tema del negrito Eddie Floyd, uno de los buenos vocalistas de la Stax norteamericana.