En el tono que ha utilizado Julio de la Rosa a la hora de abordar temas como el amor, siempre ha habido algo de inconformismo, de rebeldía y hasta de rabia, hasta que llegó el más relajado “El Espectador” (Recordings From the Other Side, 2008). Su continuación, “La Herida Universal” (Ernie, 2010) es una ventana por la que entra más luz aún que en su disco anterior. Un trabajo relajado, en el que se le nota cómodo, pero además, en el que conocemos a un Julio de la Rosa más festivo, más celebrativo, aunque no evite la tristeza en muchos de esos momentos.
“La Herida Universal” habla de relaciones entre personas, de encuentros fortuitos, pero todas las historias tienen como personaje común a un canalla, a un desencantado con el amor. Sin embargo, mira a este personaje de forma tierna la gran parte de las veces, e incluso celebra su perdición, como sucede en “Las camareras”. Vuelve también a sus temas más íntimos con “Uno”, “El temporal” o “El anzuelo”, en los que este canalla herido, descubre su lado más vulnerable. Si con “El Espectador” había luz, mar y un ambiente relajado, en “La Herida Universal” hay nocturnidad, cubatas y flirteo. Y la posterior resaca.
Por si fuera poco, hay hasta temas bailables, además de “Las camareras”, como “Violines de noche” e incluso “Sexy Sexy Sexy”. También “Mierda de canción”, donde ironiza sobre la propia calidad del tema, mientras su personaje se arrepiente de los errores cometidos.
En el lado negativo se puede decir que los dieciséis cortes abarcan la misma temática, con un sonido y una cadencia muy similar en varias de ellas. A veces cuesta diferenciar unas de otras, excepto en aquellas en las cuales es melódicamente memorable. Además, la forma de abordar esta herida universal que es el amor, también es recurrente en muchas de las canciones.
Aunque no el mejor -el depresivo “Las Leyes del Equilibrio" (Recordings From the Other Side, 2005) de forma y fondo es hasta ahora insuperable-, es su disco más accesible, y también un paso valiente en su carrera, ya que ofrece su cara más desconocida.