Había que hacer caja y para hacer caja nada mejor que meter la mano en los bolsillos de los papás con el pretexto de canción recomendada a sus vástagos. Así que de nuevo su hija Rosa Mary la acompaña en “La balada del vagabundo”. De nuevo un diálogo padre-hija con moralina socioeconómica a medida del régimen imperante y con unos ciertos tintes teológicos. Aquí no obtuvo demasiada repercusión, pero en Sudamérica, donde el cantante editaba regularmente sus principales discos, sería la canción más famosa de este cantante.
Los chavales habíamos descubierto las series americanas de televisión y una de las más famosas era “Bonanza”, así que se le puso una letra al tema de entrada que cada domingo por la tarde escuchábamos y ya están los hermanos Cartwight plastificados y cantando en español sin bajarse del caballo.
La canción más destacable del EP, no obstante, es “Los comediantes”, un gran tema de Charles Aznavour lleno de ritmo que al año siguiente serviría para lanzar la carrera de la ye yé Franciska. Otra de las grandes interpretaciones de José aunque venga perdida en el fondo de un remoto extended play.