Imparables

Algo hay de autoconvencimiento en la nueva entrega de Suzio 13, de afirmación en sus posibilidades. Desde su mismo título, haciendo mención a la imposibilidad de pararlos, desbordantes de energía como la del tren del dibujo de la portada que marcha sin control levantando con su velocidad incluso las vías por las que circula. Los agradecimientos mismos redactados en el libreto interior para con distintas secciones de seguidores en diferentes barriadas de Madrid habla asimismo de la confianza, a pesar de las dificultades y reveses, de haberse consolidado como referente válido de ese punk rock correoso, de barriada, ya sea Suanzes o Vallecas, que protesta y refuerza la sensación de amistad y unidad ante agresores y opresores. Este “Imparables” destila igualmente la satisfacción de quien ha arriesgado con la apuesta y se ha visto fuerte y convencido de haber acertado con lo que se quería decir y cómo decirlo. Otros hubieran dudado antes de desnudarse emocionalmente ante quienes quizás los esperaran más (impersonalmente) duros o de mezclar en sus discos palos y vertientes más allá del puro rompe y rasga, pero éste desde luego, no es el caso de los madrileños.

No dudan en consolidar los vientos que ya probaran en su anterior “La Unión Hace la Fuerza” (Potencial Hardocre, 2014) y que ponen momentos de “Joven rebelde” o “Ha salido el sol” en parámetros cercanos al de una orquesta de soul o de revista de cabaret. Tampoco en adentrarse en territorio ska como “Recuerda”. Y es que en sus discos te puedes encontrar eso junto a rock bailable (“Dosis de punk rock” que canta Adri) o nostalgia de final de los 70 (“Bombas de relojería”).

La dosis de punk duro la aseguran con entregas como “Bailando con mi locura” o “Eres un mierda”. De igual manera “Terroristas” es rock duro y como en otras ocasiones en las que no canta Sergio, pueden llegar a sonar como Barricada (“Deprisa”, que canta Alberto).

Sonido impecable, cuidado, con un mimo que va más allá del de una banda de punk correoso, garantizado por idénticas condiciones de grabación de su trabajo anterior (estudios Corleone en abril de 2015), verdadero laboratorio de pruebas de lo aquí consolidado. Suzio 13 se afianzan como uno de los buques insignia de la factoría vallecana de Potencial Hardcore.