Gran Bola de Nieve

El debut de Estrategia lo Capto! supone una evolución del trío respecto a cuando todavía eran cuarteto y se hacían llamar Salchicha. Ya que a pesar de ser diferente banda los mimbres de este cesto ya se podían encontrar allí. Pero los temas de Estrategia lo Capto! son más concisos, urgentes y directos respecto a los incluidos en el single de Salchicha, allí los temas eran más largos y había un amplio margen para la improvisación. A pesar de todo esto, el trío mantiene toda la amalgama de sonidos y esa pizca de locura sonora que hace que cada escucha sea una aventura, y en donde se puedan descubrir nuevos matices en cada escucha.

Clasificarles es una tarea complicada, si decimos que a los mandos nos encontramos a Ramón, componente de Ginferno, podemos hacernos una idea. Si rastreamos en su música nos toparemos con cosas de los neoyorquinos Massacre, los trallazos sonoros de Wipers, o una pizca de la locura de Naked City o Art Bears. Todos ellos, como los propios Estrategia lo Capto!, emparentados por el gusto en el ritmo, y es que como cantaban The Slits “In the beginning there was rhythm”.

“Gran Bola de Nieve” se inicia de un modo trepidante con “Massanassa” y “Cambio vatio nazi por muerte segura”, donde Estrategia lo Capto! con sus ritmos primitivos y tribales incitan al baile más salvaje, a moverse espasmódicamente; A ellos volverán al final del disco en el tema “Caballo de Trípoli”. Después dan paso a “100 grupos”, tema con reminiscencia surf-rock al igual que “Bocadillo humanitario”.

Poco a poco el disco se torna más oscuro e introspectivo, nos encontramos con “Eres hum ano”, un cruce de post-hardcore y rock mutante que alcanza su mayor expresión en “Entrada a Túnez”, uno de los mejores temas del álbum, y “Palabras rellenas de grasa” donde la locura alcanza un grado máximo.

Del resto del álbum nos encontramos con temas post-rockeros más convencionales “Llámame José” y “Saltitos hacia atrás”, y para cerrar el disco graban el tema “Frankenstein”, versión del grupo garagero finés 22-Pistepirkko.

El mayor pero que se le pueda achacar es en el tratamiento de las voces, a menudo apagadas ante el torrente sónico salido de sus instrumentos y quizás hubiese sido mejor haberlas integrado como un instrumento más, esto no es generalizado ya que sobre esto destaca “Dama doma”.

Una pena que este proyecto tan creativo no diera más de sí porque “Gran Bola de Nieve” es un disco valiente y arriesgado dentro de la escena musical española que pone de manifiesto que con tiempo y medios suficientes esta banda nos podía haber deparado muchas alegrías.