Abren gritando “Gracias, gracias, gracias” entre coros celestiales para a continuación adaptar al castellano la canción de Remo Germani “Cosi come viene” -rebautizada como“La vida es así”-.
En “Al sonar el clarín” Pucho Boedo hace una demostración vocal secundada por un despliegue instrumental que logra aumentar el carácter épico de la composición. Cierran con los coros redentores de “A la buena de Dios”.
Pucho Boedo comienza a adoptar claramente el papel de crooner, de hecho tenemos que decir que se trata del primero de la música gallega y uno de los primeros a nivel nacional.