Bodrio sin paliativos es el calificativo para este single de Los Relámpagos en el que ya no participan José Luis Armenteros y Pablo Herrero, que habían abandonado el grupo el año anterior. En la cara A, el desprevenido oyente se tropieza con una versión instrumental del Himno de Batalla de la República (de la república norteamericana, claro, pues por aquí las cosas no estaban como para exaltaciones republicanas). Para los que no les suene el título original ni el “Gloria”, que figura en la portada de este single, aclarar que no es otra cosa que el archifamoso «Glory, glory, aleluya» cantado en iglesias, canchas deportivas y donde se tercie. La cara B mejora algo sin pasar de un tema rutinario que poco o nada aporta a la brillante carrera de Los Relámpagos.
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