Funeral Económico

Funeral Económico

Es del todo imposible encasillar los discos de El Desvän del Macho en género o apartado alguno. Es más, resulta harto complicado hacer cualquier análisis de su música en los términos habituales con los que afrontar cualquier otra banda. Sus letras se mueven en planos distintos, son escurridizas y complicadas como si de poesía de Leopoldo María Panero se tratara. Es prosa de pesadilla de hospital, con ese gusto y atracción por toda la cuestión de vísceras que de siempre gustó al grupo. Letrinas, orines, nalgas, escatologías de agallas, carnes, uñas aún vivas de cadáveres y redefinición de los términos: el útero como “tierra embalsamada donde los hombres producen vidas, Dios y las mujeres muertes vigiladas“.

La música se une, en un plano diferente, a esa complejidad que elaboran en cada entrega. Nada de lo que graban resulta sencillo, asimilable en una primera escucha, sino que se requiere de varias pasadas para poder ir reconociendo parte de los detalles que han incorporado, o las estrategias con las que han ido tejiendo cada tema. Poco o nada se dice de todo este proceso de grabación en el disco. Se preparó el material preliminar en un fin de semana que pasaron en Santander, en La Torre, el caserón de Pedro Blackheart, donde grabaron audio en directo. El trabajo en serio se terminaría con el paso por los estudios Katarain, intermitentemente abiertos, y cuya ambientación en casi desuso de seguro afectaría al espíritu general impartido al disco.

Hablan de novedades con respecto a otras veces: cambio de bajos y ausencia de saturaciones en las guitarras en las tomas en directo, esperando a incluirlo como detalles posteriores, junto a los ecos de las voces del bajista. Se describen toques progresivos en los fraseos de bajo y guitarra, estructuras en las que apenas se repiten compases y en los que la voz se limita a hacer de un instrumento más en lo que desgrana la distopía narrada. Temas en consecuencia cortos, ofreciendo pocos agarraderos al oyente que se percata con el final de la canción de que acaba de escuchar algo inusual.

Y si han limitado al mínimo como decíamos la información técnica en portada y hoja interior es porque ambos son meros soportes para la tercera vía lírica que ofrece la nueva entrega de los de Mondragón: los dibujos de Luis Durán. Artista residente en Oñati, a poca distancia del grupo, renegoció el encargo inicial que giraba en torno a una funeraria que pretende minimizar costes ofreciendo un servicio en el que cadáveres de allegados comparten ataúd, para construir una historia, autónoma de por si, pero fundamental en el devenir de la obra conjunta. Si por lo general éste ha sido un apartado destacado en los discos de El Desvän del Macho con “Funeral Económico” cobra ya tintes de obra maestra. Toda la tira, que evoluciona de manera algo diferente a lo sugerido por la banda originalmente, termina además por dar nombre a un disco que originalmente estaba concebido para no llevar título alguno.

A pesar de las novedades, suenan reconocibles a pasajes previos en canciones como “Di, a mí no, butano“, con una tensión que ya es asignable al cancionero de los vascos, o en el tono algo más lento de “Ana y canibal“. En cualquier caso un disco enorme, sobresaliente a descubrir de manera personal e intransferible. Ahora más que nunca, no dejes que ninguna palabrería, para empezar la de esta misma reseña, te confunda: Te toca a ti solo descubrir y disfrutar este Funeral Económico.

Grupo:

Es probable que El Desvän del Macho...

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Tracklist:

  1. 61%
  2. Pocilga (enturbio)
  3. Cuádriceps
  4. Distancia entre corazón y axila
  5. Di, a mí no, butano
  6. Petrogrado
  7. Funeral económico
  8. Balido felpudo
  9. Madre arcada
  10. Ustel edo la vaca
  11. La castidad del omóplato
  12. Ana y Caníbal
  13. Dentera

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