Fuera de Lugar

Segundo disco en solitario de Rosendo con bastante menos éxito que su disco de debut, quizá se crearon demasiadas expectativas, quizá se le exigió demasiado, quizá se esperaba otra cosa, pero lo cierto es que el éxito no fue tan grande. Y hasta cierto punto es algo injusto, porque estamos ante un disco muy digno.

“Cara a cara” es un comienzo fulminante y llena de vida que da paso a guitarras con mucho feeling dando paso a “Fuera de lugar” que da título al disco y aguanta perfectamente el envite con mucha suficiencia. “Aguanta el tipo” cierra esta tríada inicial de canciones haciendo sombras chinescas en la pared del punk rematando con un solo ágil y muy resultón.

En un tono algo más tranquilo “El ganador” ataca a la alta burguesía y los que le señalan con el dedo, el de Carabanchel recorre las pentatónicas con garbo mientras canta muy inspirado, tras la inclasificable “Obstáculo impertinente” arranca “Entonces, duerme” y su deje de balada ochentera.

En la recta final del disco “¡¡De repente!!”, una canción de ritmo marcado con un Rosendo cantando con muchas ganas, “Gota a gota” un ejercicio semi acústico de trenzados de guitarra y para cerrar un tropel de caballos en “Navegando”.

En general su calidad no es tan alta como su primer disco, «Loco por Incordiar» (RCA, 1985), ni tampoco lo fue su éxito comercial, pero de ahí a decir que es un disco menor media un abismo. Y considero que es justo decirlo.