Autoproducción de dos bandas amigas: Fabuloso Combo Espectro y Paco Frutos y Esposa. Entre ambos se encargaron además de ir estampando uno a uno los sellos que diseñara Olaf Ladousse (Solex, Los Caballos de Dusseldorf) para la ocasión. Antifaz en rojo con las iniciales del grupo para los primeros y monstruo ameboide en color verde e iniciales para los segundos.
Fabuloso Combo Espectro tenía una canción, «Rey Midas de la televisión«, grabada en la misma sesión de Semana Santa de 2008 en los estudios Tigruss de Gandía (Valencia), que, debido a su duración, no pudo incluir en su sencillo de debut «Fabuloso Combo Espectro EP» (Producciones Esporádicas, 2009). Encontraron en la propuesta de Paco Frutos y Esposa el complemento ideal para editarlo en este compartido. La cortaron para la cara A de este disco, haciéndolo girar además a 45 r.p.m., a diferencia de los 33 r.p.m. que utilizaran sus compañeros de proyecto para los cuatro temas con los que contribuyeron al mismo.
Es «Rey Midas de la televisión» un discurso hablado, lanzado contra un fondo que asegura una secuencia rítmica saxo-chirriante, y que a veces rompe al modo de aquel «The end» de los Doors de Jim Morrison. Toda esta puesta en escena como excusa para una disquisición sobre el ataque doméstico que sufriera José Luis Moreno, el de los muñecos.
La cara B, la que gestionan Paco Frutos y Esposa, tiene algo de descenso a los infiernos. Sonido opaco, oscuro, a lata en algunos casos, para unos temas dominados por un timbre y maneras cercanos a los del German Coppini de los primeros Siniestro Total.
Todo comienza con una intro a base de repeticiones y aceleraciones de un simple «pero«. Y es que algo de juegos a partir de una única palabra hay en las ofertas a medio camino de la experimentación musical y la performance sonora que propone el grupo.
Telescopios parar ver las trompas de falopio de la vecina, ratas y una especie de himno imposible con tintes hasta de Eskorbuto y de zambomba cósmica de fondo.
Disco de culto pergeñado con lo más oscuro y recóndito de dos bandas con ganas de malditismo.