Escama

Sin duda el disco que les sirve a VVV [Trippin’You] para situarse en posición favorable de despegue del proyecto. Precedido por el ya notable «L’Ennui» (Autoplacer, 2018), es sin embargo con esta nueva entrega donde el trío consigue desplegar toda la intensidad y potencia de una propuesta basada en una fría electrónica sin compasión con letras de calado existencial.

Para su grabación se utilizó la misma casa de Adri, el cantante, y el estudio que Willy Chistoulas (Somos la Herencia) tiene con Olivier Arson.

Una de las mejores muestras la constituye el tema con el que inician las hostilidades: «Destrucción». Uno imagina un fondo helado para la cortante línea con la que se desarrolla el marco sonoro de una letra irremediablemente destructiva.

También manejan con soltura los tiempos más lentos en los siguientes cortes, que como «Ataque de pánico en la Sierra», componen combinando una densa intensidad oscura con menciones a ansiedades y dia0zepam con la voz de Adri en su tono ideal para rubricar el aire claustrofóbico. Es uno de los momentos más sobresalientes.

En «Ya no tienes miedo» se entreteje igualmente una red sonoro y temática que invita al baile espectral entremezclando la simple danza y la muerte («Bailas como si estuviera muerto para ti» o «como si tuvieras miedo a morir» dicen en la letra). «Mátame de amor que de odio me mato yo» pregonan en «Ambivalencia».

Pero situada ya casi en el umbral de la despedida, el disco vuelve a tener un instante memorable con «Invierno nuclear», donde las ya mencionadas componentes de oscuridad, inestabilidad emocional y electrónica de poner los pelos de punta, se entremezclan para mostrar de lo que es capaz el grupo. «Copas de cristal / vino y ansiedad / un verano de amor / un invierno nuclear» repetido en bucle.

«Redención» (con algo de O.M.D. en algunos detalles) y la sobresaliente y trepidante «Siroco» (que vuelve a disparar un poco la intensidad) se encargan de cerrar el disco.

Imperdonable si te perdiste el hacerse con una de las copias de la edición limitada que pusieron en la calle.