En 1974 la opinión pública dividía sus preocupaciones entre los últimos coletazos de la dictadura franquista y las tetas de Silvia Krystel, protagonista de “Enmanuelle” (Just Jaeckin, 1974). Una película que aquí se estrenaría posteriormente, pero que propició peregrinaciones al sur de Francia para verla.
Esperando el estreno, José Guardiola graba su tema musical con dicción clara y apostura varonil. De esta manera, como el común de los españoles, pasaba con poco disimulo de las canciones religiosas a los temas eróticos, aunque la letra española es apta para cualquier colegio de monjas. Eso que el humorista Pajares definió como ir del coro al caño y el caño al coro en una sociedad española en perpetuo estado de ebullición.