Elige tu Camello

Elige tu Camello

Pertenecen Tiparrakers a esa estirpe de bandas del norte que se dedican en cuerpo y alma a un rock mestizo, plagado de contribuciones de muy diversas fuentes (ya sean escandinavas, australianas, norteamericanas…) que lo endurecen y fortalecen. Como si añadieran esquirlas de metal para lograr una aleación rocosa y de gran dureza en el que resultado se entrecruza con el punk contundente. Una propuesta que probablemente tenga sus raíces en todo lo desarrollado por grupos como La Perrera, Nuevo Catecismo Católico, Señor No… Un guitar-killer, batería como apisonadora y desparpajo chulesco y desafiante al micro como ingredientes para asegurar el éxito de la fórmula sobre el oyente.

Grabado, mezclado y masterizado por Jon Asier Zubelzu en los Gaua Studios de Mungia, y con una presentación apoyada en el gran dibujo del camello para la portada de Nuri Draka, la nueva entrega de los de Baracaldo rezuma electricidad y pegada desde el primer corte. “Recuerdos de Corea” empieza efectivamente con ruidos de helicópteros y conflicto bélico, pero rápidamente se comprueba que el verdadero peligro viene de la mano de esa guitarra combinada con el martilleo pilón de la batería. En un momento han llenado toda la atmósfera a tu alrededor de sonido Detroit y afiladas guitarras.

Las jovencitas achampanadas, los jovencitos torneados con cara de Spok, chocolifting, miel y botox … para cuando quieres darte cuenta ya ha acabado el minuto y medio de la canción que da título al disco. Vertiginoso.

Con “Doble condena” levantan ligeramente el pie del acelerador para recrearse en efectos y melodía. Uno de los mejores momentos. Deudas, acreedores, confesores…

El aire de banda sonora de película de gangsters se mantiene al llegar a “Código del hampa” y las formas de Motörhead en “El ojo” y su tratamiento de la información para consumir ya masticada.

Recuperan “Demoledor“, el tema con el que abrían el “Delirio Tóxico” (Autoeditado, 2010) de su debut. Y claro, suena apabullante para cerrar el disco. Si Rubén Blades tenía a Pedro Navaja, Los Fabulosos Cadillacs al León Santillán o al Matador, Tiparrakers cantan del que pretende ser el general de una banda de tíos que escupa rock and roll al hablar. Porque eso y no otra cosa es lo que hace este grupo de El Tubo: escupir rock and roll.

Historias de compañías poco recomendables, de reacciones violentas, flacos de cara picada de pocas bromas con las mujeres, chulos de disco bar… Letras de acidez y mordacidad para “Su eco” y velocidad, como la de “Cabeza marmol“, otro torpedo con ritmos marcados por la locura, mientras las guitarras dibujan afilados arabescos con un fondo de baquetas-martillos.

Para “Gafas de oro” parecen pervertir un ritmo inicial de glam para volverlo rock metal grasiento. “Haces muchas risas y sin prisas tomas decisiones / lo único que aprieta es la cintura de tu pantalón” Letras con revueltas para rock pesado de alto octanaje.

Cuando acaba el disco sólo te queda un zumbido en los oidos y la sensación de que te acaba de arrollar una locomotora.

Grupo:

Pertenecen Tiparrakers a esa casta amante de...

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Tracklist:

  1. Recuerdos de Corea
  2. Elige tu camello
  3. Doble condena
  4. El ojo
  5. Su ego
  6. Vater dorado
  7. Código del hampa
  8. Cabeza mármol
  9. Gafas de oro
  10. Demoledor

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