A partir de 1963 las canciones de Gelu van a tener en buena medida manufactura italiana, convirtiéndose en la voz española de los hits femeninos italianos, particularmente, los de Rita Pavone, con cuya voz la granadina guarda un cierto parecido tímbrico y estilístico. La primera de estas traducciones va a ser “La partita di pallone” o “El partido de fútbol”, que venderá en España mucho más que el original italiano. Una canción simpática, bien arreglada, en la que se queja del abandono que supone tener como pareja un hincha futbolístico en unos años que la presencia de la mujer en los campos de fútbol no era asunto habitual. Al final, se siembra la duda con ese final del estribillo: “Quizá yo me entere alguna vez de la verdad”.
Junto a ésta, el EP contiene otra referencia obligada de la época, en forma de esas “500 millas”, que tantas versiones conoció en castellano.
En suma, un buen disco, de rabiosa comercialidad, que siguió manteniendo a Gelu en el trono de las jóvenes voces femeninas españolas.