El Mirlitón

Yerba Mate debuta con un tema firmado por un tal Albertini. Un tema muy valorado por su bulliciosa alegría en sus primeras actuaciones en directo. Se trata de un charlestón que debe su título al uso del mirlitón, una especie de pito o kazoo hecho de caña que produce un sonido característico. El tema desborda desenfado y es cantado de forma jocosa sobre un fondo de banjo e instrumentos de viento. Se utilizó como bailable desenfrenado en las primeras discotecas catalanas.

La cara B es un tema instrumental de clara vocación jazzística, compuesta por Juan Carlos Cáceres, trombonista y director musical del grupo. Recuerda mucho al sonido típico del jazz de Nueva Orleans, que floreció allá por 1930 en Estados Unidos.

Con este disco, Yerba Mate se apuntaba a la corriente retro-guasona iniciada en Gran Bretaña el año anterior con grupos como New Vaudeville Band.