Joya de la corona, «Eh txo!» (Ohiuka, 1984) es uno de los sencillos incunables del Rock Radikal Vasco. Salió acompañando a «Hertzainak» (Soñua, 1984), y comparte con el LP la ambientación de la portada, aunque en este caso la estrella rota, logo de los primeros tiempos de la banda de Vitoria y las letras con las que se escribe el nombre de la misma sale junto a una foto, impagable, tomada aparentemente en un cuartel de la policía autónoma vasca.
Dos buenos temas los escogidos para el sencillo. El primero, «Eh txo!«, mantiene un contagioso ritmo de ska con saxo y batería en plenitud de forma. A pesar de la energía que derrocha su música, se trata en realidad de un lamento al comprobar los efectos de adormidera que la llegada de la democracia tiene en todo intento de lucha o rebelión. Termina la canción con una llamada para salir a la calle, como cantara luego también Kortatu: «Eh txo! gehiegi itxoiten duk atera hadi kalera, ta berreskura hire martxa itxoiten ezin duk ezer lortu» («¡Eh tío! Esperas demasiado. Sal a la calle y recupera tu martxa, esperando no puedes conseguir nada«).
«Sigarillos amarillos» comienza con balanceos con ganas tropicales. Transcurre la vida hacia abajo, siempre igual, fumando y bebiendo, en una espiral que empezó con aquellos dieciocho cigarrillos amarillos en cada paquete. Saxo juguetón, soportado por un bajo remolón. Juntos parecen estar llamando continuamente a la acción, como esperando la aparición definitiva de una guitarra que rompa la secuencia. Termina sin embargo tranquila la cosa.