Si ya el nombre de T E J E R O echará atrás a mucha gente antes de darles una mínima oportunidad, con el nombre del álbum en un inglés fonético y la portada con una foto del libro de memorias de la actriz, cantante y política Ilona Staller, más conocida como Cicciolina, corren el riesgo de ser tomados como un grupo broma. Y T E J E R O puede ser muchas cosas pero desde luego no es un grupo para tomárselo a chanza. Y es que uno de los puntos fuertes de la formación son lo afiladas de sus letras que rezuman ironía por los cuatro costados, el máximo exponente es ese hit instantáneo que es «Víctimas«, pero sin perder un punto de humor siempre necesario en esta vida como en «Mi voz interior«, ese trallazo post-punk que es «Momento ése o ése» o «Todas las amas de casa» con la que abren esta referencia.
Y es importante destacarlo porque en el ámbito en el que se mueven sus canciones lo sencillo sería caer en el chiste fácil y en su propia parodia lo cual tiraría por tierra todas las buenas intenciones de la formación. En el terreno musical destacar la búsqueda de la inmediatez mediante temas pop con melodías pegadizas como la ya mencionada «Víctimas«, «Mi voz interior» con sus aires folclóricos o «Xavier García Albiol» que recuerda a los T E J E R O más descacharrantes de sus inicios.
Las letras del grupo barcelonés atizan a diestro y siniestro no dejando títere con cabeza. Retratan a la clase política con ese «Xavier García Albiol«, tema dedicado al alcalde de Badalona que cierra con un deseo «La derecha rancia, está ganando / ¿Dónde estáis? / ¡Despertaros!«, a la monarquía con «El rey puede violarte«, sacado de una portada de la revista satírica Mongolia, y a la sociedad en general en «Víctimas«.
En «Marca España» engloban elementos folclóricos –el toro de Osborne, la cabra de la legión- con símbolos de la corrupción –aeropuertos sin funcionamiento- y políticas neoconservadoras –privatización de la sanidad pública- para destacar que si por algo se conoce este país es por el sol, las playas y los chiringuitos como hace cincuenta años. Cierran este álbum con el tema «Signos» donde colabora con los sintetizadores Ana Fernández-Villaverde (La Bien Querida).