Dos de las canciones más atractivas y menos especulativas, léase más asequibles para paladares poco entrenados, forman este single extraído del LP “Luna Llena” (Polydor, 1975), que marca la transición entre el Pedro Ruy-Blas cantante melódico y el Pedro Ruy-Blas, músico de jazz y fusión.
Personalmente me gusta bastante más la segunda de ellas, aunque hay que reconocer que puede tener más gancho la cara A, la única del mencionado LP que tira por los cerros del entonces pujante rock andaluz.