La trama de la película va de una confrontación entre copla, personificada por Manolo Escobar, y ye yé, representado por Conchita Velasco. Tras diversos avatares, la lid termina en el Palacio de Deportes de Madrid -aquel que luego ardió- en la que los ruidosos seguidores de ambos se enfrentan en apoyo de sus ídolos. En esa escena final, Conchita combate en el terreno de Manolo y le endilga una versión de “La morena de mi copla” con una letra que si la pilla Bibiana Aído la hace himno del extinto Ministerio de Igualdad. Una letra trufada de feminismo cañí y nacionalista, que es para ponerla en los anales de los letristas españoles. De puro esperpéntica, casi acaba por tener su gracia.
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