Culpables

Presentado en 2018, la nueva entrega de Guadaña, estaba sin embargo grabada casi en su totalidad ya hacía un par de años antes. Habían trabajado en su local de ensayo del hipódromo de Son Pardo en Palma, registrando todo en directo juntos y regrabando luego guitarras y voces. De las mezclas se encargaría luego el bajista Andreu. Pero como insisten, todo se realizó con calma, mucha calma. No había tampoco premura por sacar disco porque hacía bien poco que habían puesto en la calle el trabajo en directo «En Carne Viva» (Autoeditado, 2016).

Su edición fue resultado del esfuerzo del mismo grupo y para la portada contaron con la colaboración de Rakel Tintart, mujer del cantante, Albert Busquets, que, a tono con el título, muestra el mazo de un juez en el momento de impartir justicia.

Elaborado en una línea muy similar a la de trabajos anteriores, Guadaña reinciden en su diatribas y consignas, para lo que no tienen problema alguno en repetir estribillos, coros e insultos hasta el infinito. Es el suyo, punk correoso que no se para en demasiados detalles con tal de que el mensaje de protesta con el que dejar claro su malestar llegue rápido al oyente. El precio a pagar en algunos casos quizás es el uso de fórmulas ya sabidas de «vasca» que se junta con ganas de montarla.

Con un poso evidente de nostalgia tanto para con el sucesivo cierre de los bares habituales como con temas legendarios del punk de siempre. «Volver» es así un repaso que recorre muchas de las letras icónicas del rock radikal vasco entre otros, en el que declaran su intención de «romper las normas, volver al rock and roll«.

Quizás por ello no extraña la inclusión de dos versiones de temas extraídos del repertorio de Cicatriz («Txota«) y de La Polla Records («Nuestra alegre juventud«).

Precisamente con «Volver» rompen, acertadamente además, con el sistema a piñón fijo con el que parecen elaborados los primeros temas del disco. Ofrecen algo más, una alternativa diferente al rompe y rasga. Una opción que cobra aún mayor peso cuando acometen «Hablando a un muerto«, probablemente de lo mejor del disco.

Muestran asimismo una faceta endurecida, de guitarras y maneras casi de rock duro en momentos como «Basura» y dejan en «Te van a robar» montada una despedida como de final de concierto en directo.

Guadaña siguen vivitos y coleando, manteniendo el paso a base de un más que encomiable esfuerzo.