Nuevo trabajo de Cosecha Roja y nuevo sello, en esta ocasión el mallorquín Sonic Recordings, que se encarga de sacar adelante estas diez canciones que muestran una mayor madurez de los orensanos. Mantienen los mismos desarrollos pop de siempre pero el nivel de las composiciones sube considerablemente. Para la ocasión revisan “Un par de cosas” de «Vacaciones Permanentes» (98.6, 1994) y “Un millón de besos” de «Aquellos Maravillosos Años» (Maybe Tomorrow, 1996).
“Las cicatrices que nos deja la imaginación / todo lo que ibas a hacer / lo que no hiciste y no sabes porqué / quieren desaparecer / las cicatrices que los sueños van dejando / aparecerán sin avisar / para amargarte la vida / están muy bien ahí escondidas”… canta Carlos Rego en “Cicatrices”.
Los aires truculentos que terminan estallando en la oscuridad llegan con “Se puede decir”, el popcristalino con “Violines y campanas” y los medios tiempos más íntimos con “Llueve sobre mojado” y “Conducir despacio”.
Como anécdota decir que el disco está dedicado a los habitantes de Cicely, Alaska y alrededores. Cachondeo o no, su público es tan minoritario -ante la falta de promoción y oportunidades- como los habitantes de estas frías regiones; pero mucho más cálido.